La salida a la pista de Bojan Dubljevic cuando el Unicaja había completado, en el inicio del último cuarto, una larga y buscada remontada cambió el guión del definitivo choque de cuartos de final de la ACB y dio paso a dos triples de Louis Labeyrie que sellaron el pase del Valencia Basket a semifinales. [Narración y estadísticas: Valencia Basket 79-76]
Trató Luis Casimiro de sorprender con una defensa zonal pero los interiores de Valencia, especialmente Mike Tobey, tuvieron calma y determinación para anotar y obligar al manchego a quitarla.
Al ver que el partido se le iba nada más comenzar, el entrenador forzó una técnica para tratar de cambiar el rumbo, sin éxito.
La distancia no dejó de crecer, con un Valencia muy intenso atrás y certero individualmente en ataque, con un Van Rossom inmenso en el tiro. Tampoco un par de tiempos muertos le mostraron el camino al Unicaja, totalmente negado desde el perímetro.
El descanso del base belga desnudó los problemas que desde hacía minutos tenían los locales y permitió al Unicaja meterse en el encuentro con un par de triples de Alberto Díaz y de Carlos Suárez.
El regreso de Tobey y Van Rossom, que crearon una conexión que el Unicaja no supo frenar, permitió al Valencia llegar al descanso con una ventaja cómoda. Sólo los triples desde la esquina débil, especialmente de Suárez, mantenían vivo al equipo malagueño.
Una doble técnica a Diot y Dani Díez tras un enganchón sobre la bocina calentó el choque pero el paso por los vestuarios permitió que el juego volviera a su temperatura habitual, aunque con un Unicaja mucho más físico y que con la inspiración de Milosavljevic hizo dudar al Valencia.
Fue cuestión de unos segundos y el equipo de Jaume Ponsarnau se entregó a San Emeterio para pasar esos minutos sin demasiados daños, lo que le dio la calma necesaria.
El Unicaja no se vino abajo y en el tramo final de ese tercer cuarto entre Roberts y Shermadini colocaron a tiro de disputar el partido en el último parcial.
Un triple del estadounidense dio un impulso más al equipo andaluz en la primera acción. A dos se puso el Unicaja con un par de ganchos de Shermadini y por delante por primera vez con un triple del polaco Adam Waczynski, que culminó un parcial de 4-18.
La entrada de Dubljevic desactivó a Shermadini, frenó la caída del Valencia y el partido y los dos equipos se bloquearon. Pero el montenegrino le sacó la cuarta al georgiano y anotó una canasta, dos acciones que cambiaron la dinámica. Un mate estratosférico de Abalde lo confirmó.
El Unicaja se recuperó pero dos inesperados triples de Labeyrie, el primero con tiro libre adicional, le dejó muy tocado. No dejó de perseguirlo, pero los tiros libres de San Emeterio le dieron aire y tras un triplazo de Roberts, Abalde selló el pase también desde la línea de 4'70 y acabó con las ilusiones malagueñas.