La NBA y el baloncesto mundial todavía no se cree un año después que la 'Mamba Negra' no sigue entre nosotros. El trágico 2020 en el mundo del deporte comenzó con la impactante noticia del fallecimiento de Kobe Bryant. El 26 de enero se apagaba una estrella en la tierra para encenderse en el firmamento, dejando detrás de ella una leyenda que se recordará por siempre, tanto por lo cosechado en el marco deportivo como en el desarrollo de la sociedad afroamericana.
La leyenda nacida en Philadelphia sufría ese accidente de helicóptero en las afueras Los Ángeles que acabaría con su vida y la de su hija Gianna, así como otros tantos acompañantes que iban en ese vuelo. Calabasas sería el lugar que guardará para siempre el triste recuerdo de lo acontecido en esa mañana, donde la niebla y, quizá, alguna imprudencia a la hora de decidir volar fueron responsables de la tragedia que conmocionó al mundo entero.
Su carrera en la NBA comenzó en 1996 cuando fue elegido en el Draft de aquel año por los Charlotte Hornets. De inmediato fue traspasado a Los Angeles Lakers donde terminó su carrera con cinco anillos campeón. Fueron veinte las temporadas militó el mítico escolta en la franquicia californiana, en las que ganó dos premios MVP de las finales de la mejor liga del mundo y otro MVP del campeonato en el 2008, hasta que en 2016 aparcó su magia definitivamente tras algunas lesiones importantes. Cuatro años después, cuando iba a vivir su gran entrada en el Salón de la Fama, la vida le arrebató a la NBA a uno de sus grandes campeones.
Miles de imágenes para el recuerdo, partidos de leyenda, registros históricos y el '24' y el '8' colgados para siempre en el Straples; el que fuera jugador de los Lakers dejó detrás de él un legado tanto por su palmarés como por lo que dio a este deporte, pero también dejó diferentes frentes abiertos que aún no se han cerrado un año después de una fecha que quedará para siempre marcada en el calendario tristemente.
Su increíble herencia
Vanessa Bryant y sus hijas siguen viviendo el luto de forma especial. No hay mes en el que no haya algún tipo de recuerdo para el que fuera su marido. Ahora han tenido que lidiar con la gestión de todo el patrimonio que tenía Kobe. Su familia tendrá que administrar los más 600 millones de dólares que acumulaba el legendario escolta entre inversiones, empresas, casas y otras propiedades. Es uno de las personas que más ha generado en la historia del deporte y esto sigue siendo motivo de disputa.
Esta cantidad es el resultado de su elevado salario como jugador de los Lakers y sus acuerdos publicitarios con marcas como Nike, McDonald's, Coca-Cola o, más reciente, el impulso de Epic Games, una referencia de los videojuegos, a través de su sociedad Bryant Stibel & Co. Todo ello mientras tenía planes de futuro para desvincularse de ese contrato vitalicio que tenía con la marca de ropa para crear la suya propia, además de otras inversiones que le vinculaban con un futuro en los despachos de la NBA.
Sigue ganando dinero
Pero es que su nombre sigue generando una gran cantidad de dinero pese a su fallecimiento. Desde ese primer gran contrato de 70 millones de dólares por seis temporadas, acordados durante el curso 1998/1999, había acumulado el dinero suficiente como para que su familia pudiera vivir bien toda su vida. Aún así, las marcas siguen utilizando su nombre como cara visible, así como la NBA seguirá viendo como su legado supone beneficios económicos.
Según el estudio de Forbes, ha conseguido unas ganancias de 20 millones de dólares este último año a base, sobre todo, de su calzado y la ropa deportiva de la firma Nike. Las versiones 'Mamba' que sigue vendiendo la marca han sido muy solicitadas tras su defunción. De hecho, en los días posteriores a la muerte, retiraron el stock en vistas de hacer un plan especial. La gestión de estas ganancias y de los planes de futuro aún siguen en trámites entre la familia y las empresas.
Cuatro demandas
Quizá la demanda más famosa de la vida de Bryant sea la de divorcio después de que se destapara el escándalo sexual al que se le vinculó. Pero, después de producirse el accidente, también comenzó una batalla legal tanto por lo sucedido como por repartir este legado. Actualmente hay hasta cuatro demandas diferentes que se resumen en una a la policía de Los Ángeles, otra a la compañía de helicópteros, otra de la madre de Vanessa y la inclusión de su hija Capri en la herencia.
La pareja de Kobe demandó a los agentes que acudieron a la zona del accidente y que tomaron fotografías del cuerpo de Bryant con sus móviles. De hecho, desde el departamento al que pertenecían estas personas reconocieron los hechos, asegurando que al menos ocho policías habían sido obligados a borrar las imágenes. Aún así, no pudieron evitar que algunas se publicaran en internet. Mientras se resuelve judicialmente este asunto, el escándalo provocó que en California se esté estudiando que sea un delito esta actitud.
Vanessa también cree que la empresa de helicópteros es culpable del fallecimiento de su marido. La acusación de homicidio involuntario está en los juzgados contra la empresa Express Helicopters & Island Express Holding. Según la demanda, Ara Zobayan, el piloto de la nave, "fue negligente al no utilizar la atención ordinaria al pilotar la nave". La indemnización que piden supera los 200 millones de dólares, un cálculo al que han llegado teniendo en cuenta lo que han dejado de recibir por su prematura defunción.
Pero los problemas también están dentro de su propia familia. La madre de Vanessa, Sofía Urbieta, solicitó una indemnización por el tiempo que trabajó como niñera de sus nietas después de que la pareja de Kobe Bryant la echara de la casa en la que vivían todos. Esta señora asegura que el jugador de la NBA le prometió cuidarla "toda la vida", por lo que solicita cinco millones de dólares, una casa y un todoterreno. Aún está por resolver esa cuestión en los juzgados.
Esta prematura muerte también hizo que a Kobe se le olvidara actualizar su testamento. En su última actualización no constaba Capri como una de sus legítimas herederas. La primogénita más joven de Bryant, que tenía siete meses cuando su padre murió, no podría recibir en partes iguales a sus hermanas la cantidad que le correspondería tal y como deseaba su padre. Este es el lío judicial que parece que se resolverá más pronto.
La polémica autopsia
No solo se creó polémica en torno a la muerte del escolta por el helicóptero y el piloto, si no por lo que se encontró en la autopsia a la que se sometió. Kobe Bryant tenía en su sistema el medicamento metilfenidato. Este se vende bajo la marca Ritalin y sirve para tratar el trastorno de déficit de atención con hiperactividad y la narcolepsia. A día de hoy nadie ha podido asegurar que esto hubiera tenido que ver en lo que sucedió en aquella mañana en California.
En cualquier caso, todas estas polémicas abiertas no conseguirán nunca borrar de la memoria del baloncesto lo que significó Kobe Bryant para la historia de este deporte. Este martes se cumple un año de lo que nadie quiso que sucediera nunca. En ese helicóptero quedó la magia de un equilibrista del balón naranja, la sonrisa eterna de la mamba más letal del mundo y la figura de un deportista de época. Aunque él dijo "Mamba out", nunca se irá del recuerdo de los aficionados.
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