Los Denver Nuggets hicieron historia en la NBA. Los de Colorado se proclamaron por primera vez campeones tras lograr la victoria en el quinto partido de la serie (94-89) frente a Miami Heat. Con Nikola Jokic a la cabeza, los de Michael Malone firmaron unas sensacionales Finales e hicieron buenos todos los pronósticos.
Aupados a su líder sobre la cancha, los Denver Nuggets consiguieron su primer título en los más de 50 años de existencia de la franquicia. En una mágica noche frente a su público en el Ball Arena, los de Nikola Jokic tocaron la gloria de la NBA tras ser el mejor equipo en los playoffs.
Denver estuvo exigido hasta el final, pues el espíritu batallador de los Miami Heat les hizo sufrir hasta que el último instante. El siempre voraz Jimmy Butler quiso llevar la serie hasta el sexto partido con sus 13 puntos en el cuarto decisivo, pero Jokic y Jamal Murray no estaban por la labor de extenderla más y certificaron el triunfo de los suyos. La dupla de los Nuggets sacó a relucir sus mejores galas para coronarse como campeones.
Nikola Jokic, en reconocimiento al gran juego desplegado durante la final, fue reconocido como el MVP de las Finales. El pívot serbio fue el mejor de los Nuggets, dominando todas las facetas del juego, y guiando a la franquicia de Colorado al primer anillo de su historia. El 'Joker' fue la estrella a lo largo de todos los playoffs y se consagró, si es que no lo había hecho ya antes, frente a Miami Heat.
Tal fue el poderío de Jokic sobre la pista que se convirtió en el primer jugador de la historia en liderar unas eliminatorias de playoffs en puntos, rebotes y asistencias. Una oda al baloncesto por parte del 'Joker' que le ha servido para coronar a su franquicia como la mejor de la NBA.
Sufrir hasta el final
Tanto Denver Nuggets como Miami Heat saltaron al Ball Arena con las cosas claras. Uno quería proclamarse campeón, el otro alargar la serie hasta el sexto partido. Los de Spoelstra consiguieron domar a su los de Malone en los dos primeros cuartos gracias a su acierto.
Los de nervios de los de Colorado por la presión de proclamarse vencedores hizo mella en el arranque de partido. Sin embargo, Jokic y compañía fueron poco a poco entonándose hasta conseguir reducir la desventaja en el marcador. Con Adebayo como principal baza en los Miami Heat, Denver se marchaba por detrás en el marcador al final del primer cuarto (22-24).
Y así continuó el partido hasta el descanso. Miami seguía dominando y confiado en mandar las Finales hasta el sexto partido y para ello recurrían a dos veteranos como Jimmy Butler y Kyle Lowry. Los de Florida continuaban explotando sus virtudes y se iban con ventaja a los vestuarios (44-51).
No obstante, tras el descanso, Jokic y Murray empezaron a sentirse fuerte sobre el parqué. El balcánico tomó las riendas de los Denver Nuggets y comenzó la escalada. Ocho puntos en cinco minutos hicieron creer con que una victoria era posible y el marcador estaba más apretado que nunca antes del último cuarto (70-71).
Era una batalla titánica, un duelo enfangado entre dos equipos que nunca le pierden la cara a su rival. Un agónico final esperaba entre Denver Nuggets y Miami Heat. Ninguno fue capaz de despegarse de su rival y no fue hasta los últimos segundos cuando se decidió todo. Tres tiros libres de Kentavious Caldwell-Pope certificaron el primer anillo de los de Colorado tras ver cómo no surtía efecto la pizarra de Spoelstra (94-89).
Una victoria histórica y que hace justicia al nivel mostrado por los Denver Nuggets. Las constantes exhibiciones de Nikola Jokic o el talento anotador de Jamal Murray dejaron a rivales de la talla de Los Angeles Lakers, Phoenix Suns o Minnesota Timberwolves por el camino. Una espera de más de 50 años que ha terminado por todo lo alto, con el anillo de campeones en su poder.