El alero estrella de los Cleveland Cavaliers, LeBron James, cumplió con el deseo de no hospedarse en el Hotel Trump de Nueva York y dijo que no fue por motivos políticos, sino por cuestión de "gustos".
James, cuyos Cavs ganaron a los New York Knicks esta madrugada (94-126, con 25 puntos en 36 minutos de LeBron), había dicho anteriormente que no deseaba hospedarse en un establecimiento de la marca Donald Trump, propiedad del nuevo presidente electo republicano, que venció a la candidata demócrata Hillary Clinton, por la que él había hecho campaña.
La estrella de los Cavaliers rechazó que su decisión se tratase de un mensaje político. "Sería lo mismo que ir a un restaurante y decidir pedir pollo en vez de un bife", explicó James a los periodistas.
James y algunos compañeros de los Cavaliers no se hospedaron con el resto del equipo en el hotel Trump Soho en Manhattan antes del partido de los Cavs contra los Knicks. La estrella de los Cavaliers admitió que esta es la primera vez en su carrera que no se aloja con el equipo, aunque indicó que fue al calentamiento matutino en el autobús del plantel como de costumbre.
James respaldó la candidatura presidencial de Clinton e hizo campaña con ella en Ohio. Varios de sus compañeros, incluyendo al veterano alero Richard Jefferson, el escolta Iman Shumpert y otros, han expresado su desilusión por el triunfo de Trump en las elecciones. "A fin de cuentas, espero que él sea uno de los mejores presidentes de la historia, por nuestro bien", comentó James. "Por el bien de mi familia, por el bien de todos". Un portavoz de los Cavaliers no especificó la cantidad de jugadores que decidieron no hospedarse en el hotel.
Por su parte, el entrenador Tyronn Lue, quien se hospedó con el equipo, indicó que "no es normal" que la plantilla se separe cuando está de gira. "Pero esa no es mi tarea principal", señaló. "Mi tarea principal es que este equipo esté listo para jugar de la manera indicada".
Varios equipos de la NBA ya han cancelado por completo su estancia en los Hoteles Trump y otros como los Cavaliers no han podido hacerlo al tener un contrato que les obliga a cumplirlo. James rehusó hablar sobre el presidente de los Knicks, Phil Jackson, quien hizo enojar al alero el mes pasado al referirse a sus amigos y socios de negocios como una "pandilla".