Quién le iba a decir a Tim Huskisson, retirado del baloncesto a sus 24 años, que la canasta iba a darle una segunda oportunidad. No sólo por permitirle dedicarse al arbitraje, sino por hacerle viral en las redes sociales gracias a su gran talento para los mates.
Después de maravillar a 11.000 personas con sus vuelos al finalizar un torneo de instituto (categoría en la que arbitra) celebrado en Missouri, Huskisson ha logrado el aplauso de muchos más espectadores. Todo gracias a las bondades de Internet: los vídeos en los que aparece machacando el aro superan las 887.000 visualizaciones en Instagram.
Las habilidades para los mates del ahora colegiado no han sido puestas al descubierto por iniciativa suya. Fueron los propios jugadores a los que se dedica a arbitrar quienes le animaron a realizar una pequeña exhibición. Eso sí, con la condición de llevarla a cabo cuando el encuentro hubiese concluido, ya que Tim no quería apropiarse de los focos que les correspondían a los chavales.
Todos alucinaron con sus aptitudes para machacar el aro en aquella suerte de debut en Missouri y el ya llamado "árbitro volador" se ha visto obligado a repetir esa actuación en otras canchas. Cuando uno es profeta en su propia tierra, todo es más fácil. Porque, sí, Huskisson es natural de Missouri.
Después de ser uno de los mejores jugadores del estado durante su época precisamente de instituto (Willard High), este antiguo alero jugó para la Universidad de Northern Colorado durante cuatro años. Su mejor temporada en el centro fue la última, logrando unos promedios de 10,7 puntos, 4 rebotes y 1,2 asistencias por partido.
Con buen tiro exterior y facilidad para penetrar, decidió buscar su primer contrato profesional en Chipre al no ser elegido en el Draft de la NBA de 2015. Su única campaña en el Enosis fue satisfactoria: segundo máximo anotador del equipo (15 puntos de media), tercer mejor reboteador (6,8 capturas por encuentro) y sin desentonar tampoco en la faceta pasadora (2,1 asistencias de promedio).
Sin embargo, Huskisson, licenciado en Comunicación, no eligió el camino del periodismo tras esa experiencia europea con la que concluyó su carrera deportiva. Tras colgar la camiseta, decidió coger el silbato de árbitro. Para ello, volvió a sus raíces, a ese baloncesto de 'high school' que tanto le había hecho disfrutar como jugador. Y, visto lo visto, parece que la decisión ha sido acertada gracias a la notoriedad que están alcanzando sus mates.
¡Quién iba a decir que un árbitro saltaría a la fama por sus habilidades baloncestísticas y no por una decisión polémica! Los vuelos sin motor de Huskisson han generado tal revuelo en Estados Unidos que el joven ha declarado que estaría encantado de aparecer unos minutos en el programa de televisión de Ellen DeGeneres. Lo consiga o no, Tim ya puede presumir de ser el primer árbitro 'dunker' de la historia.
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