La NBA se ponía en marcha hace poco menos de tres semanas, un ansiado regreso del baloncesto estadounidense y sus grandes estrellas. El show al que acostumbran en cada partido era muy esperado por todos sus fans y no ha decepcionado por el momento. Eso sí, hay un punto muy negativo que rodea su vuelta.
La polémica extradeportiva ha marcado el inicio de la NBA. Una vez dejados de lado los protocolos por la Covid-19 parecía volver todo a la normalidad, pero no ha sido así. Ni mucho menos. Bastantes casos han salido a la luz que han tornado a gris oscuro la situación en la organización que dirige Adam Silver.
El último de ellos ha sido provocado por Kyrie Irving. El base de los Brooklyn Nets se ha visto en vuelto en una polémica antisemita. Su apoyo declarado a una película con fuertes tintes contra los judíos le ha hecho ser el foco de la NBA. Unas palabras contra las que han alzado la voz muchas personalidades, incluyendo grandes estrellas de la liga.
Pero la ideología del jugador de los Nets no ha sido lo único que ha levantado revuelo al otro lado del charco. Varias controversias de índole sexual han sido destapadas dentro de varios equipos. Joshua Primo, de los San Antonio Spurs, e Ime Udoka, ya exentrenador de Boston, han sido señalados por acoso dentro de sus organizaciones.
A eso hay que añadirle la pelea interna que hubo en los Golden State Warriors. Draymond Green golpeó a su compañero Jordan Poole, lo que provocó un cisma en el equipo de San Francisco. También Miles Bridges fue acusado por su expareja de pegarla delante de los niños en verano. Un comienzo turbulento para la NBA.
Un contexto negativo que está haciendo sombra a las exhibiciones de Luka Doncic o la imbatibilidad de los Milwaukee Bucks. Y una imagen que está manchando el verdadero show que se espera de la liga más importante de baloncesto.
El antisemitismo de Irving
Kyrie Irving era el centro de la polémica esta misma semana en la NBA. Su apoyo a la película antisemita Hebrews to Negroes: Wake Up Black America. El filme, con claras declaraciones contra los judíos, fue promovido por el base de los Brooklyn Nets a través de sus redes sociales.
Rápidamente le hicieron ser el foco de las críticas por su ideología. Tanto la NBA como su equipo y gran cantidad de leyendas se posicionaron en su contra. Exjugadores de la talla de Shaquille O'Neal o Charles Barkley cargaron duramente contra él y pidieron la sanción del jugador.
El propio Irving no tardó en disculparse ante toda la comunidad judía con un mensaje en sus redes. "A todas las familias y comunidades judías que están heridas y afectadas por mi publicación, lamento profundamente haberles causado dolor y me disculpo. Inicialmente reaccioné por la emoción de ser injustamente etiquetado como antisemita, en lugar de centrarme en el proceso de curación de mis hermanos y hermanas judíos que resultaron heridos por los comentarios de odio hechos en el documental", fueron parte de sus palabras.
Pese a ello, no logró calmar las aguas en la NBA y fuera de ellas tampoco. Su patrocinador, Nike, cortó de manera tajante el contrato que les unía para las temporadas venideras. "Creemos que no hay sitio para el discurso de odio y condenamos cualquier forma de antisemitismo", recalcó la empresa en el comunicado donde hacía oficial la decisión.
Además, el castigo no tardó en llegar por parte de los Brooklyn Nets. Suspensión de cinco partidos y la obligación de donar 500.000 dólares por sus palabras de odio a diferentes organizaciones. Además, la NBA, con Adam Silver a la cabeza, también se posicionó contra el base. "Kyrie Irving tomó la insensata decisión de publicar un enlace (en Twitter) a una película que contiene material profundamente ofensivo y antisemita", apuntó la liga.
No es la primera vez que Kyrie Irving es el centro de la polémica en la NBA. El base se ha mostrado como un anti vacunas declarado y también se ha posicionado como un terraplanista convencido. Una nueva página en los cuadernos de escándalos que le golpean.
Abusos sexuales
Poco antes de comenzar de manera oficial la temporada, saltaba el caso de Ime Udoka. El en ese momento entrenador de los Boston Celtics se veía salpicado por una relación con una empleada del club. A partir de ahí, se desvelaban unas acciones íntimas inapropiadas por parte del técnico.
En un principio, fue suspendido de su cargo. Sin embargo, poco después se anunció que le apartaban de sus funciones de manera fulminante debido a la gravedad de los hechos. Un escándalo que poco tardó copar las portadas de los medios estadounidenses. La franquicia no tuvo duda alguna en echar al entrenador que les había llevado hasta las finales de la NBA en anterior temporada.
También se hizo público que utilizó un "lenguaje inapropiado" con dicha persona y que violó las normas de Boston. Pese a ello, debido a que sido apartado y sancionado por su equipo, puede volver a entrenar en la NBA esta misma temporada al no recibir castigo de ella. De hecho, ha sido muy relacionado con Brooklyn Nets en los últimos días.
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Por otro lado, Joshua Primo era uno de los jugadores más llamativos del draft de 2021. Con la undécima posición en su poder San Antonio Spurs decidió apostar por él. Poco más de un año después, la franquicia decidía cortar al jugador de manera sorprendente. El motivo, los impulsos sexuales del talentoso jugador.
El caso adquirió gran notoriedad al destaparse que se había excedido con la psicóloga del equipo, Hillary Cauthen. Esta le denunció por "ofrecérsele" sin ropa alguna para mantener relaciones sexuales en reiteradas ocasiones mientras los texanos hacían caso omiso.
Primo ha sido demandado por Cauthen por exhibicionismo. La psicóloga asegura que le enseñó sus genitales y que la franquicia "ha tardado demasiado tiempo en hacer las cosas bien". Pese a que el jugador y su abogado señalan que todo es mentira, San Antonio Spurs no dudó en echarle del equipo cuando saltó la noticia en los medios.
Otras polémicas
Si ya han sido muy llamativos los casos anteriores, tampoco ha dejado de serlo el puñetazo de Green a Jordan Poole en los Golden State Warriors. Tras destaparse las imágenes, el ala pívot de los de San Francisco quedó en entredicho tras su desmedida reacción en el entrenamiento. Fue señalado y apartado por los suyos durante varios días y obligado a pagar una cuantiosa multa, sin embargo, no sufrió suspensión ninguna en cuanto a partidos.
Otro destacado también fue el de Miles Bridges. El de los Charlotte Hornets vio cómo se daban a conocer sus actos de violencia doméstica el pasado julio. Un grave problema que hizo que fuese expulsado de la franquicia fulminantemente. El jugador se ha librado de la cárcel, pero hace varios días se sabía que estará durante tres años con la libertad condicional. Actualmente, se encuentra sin equipo tras ser repudiado por la NBA tras los actos contra su expareja.
Una serie de acciones inaceptables dentro del seno de la liga americana que ha puesto patas arriba a la NBA. Escándalo tras escándalo, apenas tres semanas después de ponerse en marcha, ha ensuciado la imagen del campeonato en un tramo inicial.