Sagan gana el Tour de Flandes
Incluso Fabian Cancellara tuvo que rendirse ante el empuje del eslovaco y terminó segundo en su 14ª participación en la clásica.
3 abril, 2016 17:24Noticias relacionadas
El eslovaco Peter Sagan (Tinkoff) ha conquistado en un ejercicio de clase la 100ª edición del Tour de Flandes, disputada a través de 255 kilómetros entre Brujas y Oudenaarde, donde realizó una exhibición que hizo honor a su maillot arcoiris de campeón mundial.
Sagan, de 26 años, ha entrado en estado de gracia. Se mostró poderoso hace una semana ganando la Gante-Wevelgem y volvió a lucirse en Flandes este domingo, merced a un ataque en el tramo adoquinado del Patenberg que acabó con la resistencia de todos sus rivales.
Cede Cancellara
El último en ceder fue el belga Sep Vanmarcke (Lotto Jumbo), quien no aguantó el zarpazo del corredor del Tinkoff, superior asimismo a la reacción del suizo Fabian Cancellara (Trek), que fue incapaz de apuntarse el cuarto título en su decimocuarta participación.
Sagan hizo en solitario los últimos 13 kilómetros con una ventaja de 15 segundos, pleno de fuerza y confianza, imparable hasta firmar su primer Tour de Flandes: una joya que ya luce en su palmarés.
El corredor eslovaco alzó los brazos con un tiempo de 6h10.42 La segunda plaza fue para Cancellara y la tercera para Vanmarcke. "Ha sido una carrera muy dura, hemos ido todo el día con el gancho. He tenido que cambiar las ruedas, que no la bicicleta, pero enseguida pude volver al pelotón. Ningún corredor quería colaborar conmigo, por lo tanto me fui solo. Esta victoria se la dedico a los dos corredores belgas recientemente fallecidos", dijo Sagan, en otro gesto tan grande como su victoria en Flandes.
El Tour de Flandes estuvo marcado en principio por una escapada de 8 hombres y por unas cuantas caídas. En una de ellas quedó fuera de combate el belga Greg Van Avermaet (BMC), uno de los favoritos, quien sufrió fractura de clavícula.
En la fuga se metió el español Imanol Erviti junto al alemán André Greipel. El pelotón mantuvo a raya a la avanzadilla, pero no fueron alcanzados hasta que el polaco Kwiatkowski, Sagan y Vanmarcke les echaron el guante a 23 kilómetros de meta.
En el Patenberg llegó el momento clave. Un adoquinado exigente con rampas del 20 por ciento puso en órbita a Sagan, que obligó a Wwiatkowski a doblar la rodilla. Solo Vanmarcke le pudo contestar al principio, pero el eslovaco estaba sobrado y no permitió más compañía que la de su maillot arcoiris.
Con 13 kilómetros hasta meta, Sagan inició su triunfal monólogo. Ni Cancellara fue capaz de reducirle un solo segundo. El campeón del Mundo volvió a lucir con fuerza, como los colores del campeonato mundial.