Apenas fueron dos segundos de ventaja después de un ataque final al borde de la extenuación. Dos segundos que le dieron la victoria de etapa, marcaron territorio ante el ímpetu de Cadel Evans y pusieron a Bradley Wiggins, su jefe de filas, como líder del Tour de Francia. Dos segundos que tuvieron algo de alternativa taurina, porque aquel día, un 7 de julio de 2012, Chris Froome nació para el gran público. El británico fue el primer vencedor en La Planche des Belles Files, un ascensión inédita entonces en la Grande Boucle, que vuelve a la ronda francesa por primera tercera vez este miércoles y donde nadie duda que el hoy líder del Sky y tres veces ganador del Tour querrá dejar huella.
No llega a seis kilómetros de distancia, pero La Planche des Belles Filles -así llamada en honor de las doncellas ahogadas en uno de sus lagos mientras huían de soldados suecos en la Guerra de los Treinta Años (1618-1648)- es una suerte de Angliru a la francesa. Más corto, sí, pero con una pendiente media del 8,5% y una rampa final del 20% que hará temblar al pelotón en pleno, aunque si hay una excepción se trata de Chris Froome.
"Tiene un equipo potentísimo y le gusta hacer diferencias en la primera etapa de montaña". Alberto Contador, quien mañana medirá su momento real de forma tras ceder 42 segundos en la crono inaugural del lluvioso Düsseldorf, conoce al británico. En realidad, todos los favoritos saben del gusto del líder del Sky, siempre de más a menos como demostró en 2013 con su brutal ataque en la cima de Ax 3 Domaines, su zarpazo en la Pierre Saint-Martin en 2015 y con el sorprendente descenso que realizó en 2016 en la etapa que llegaba a Bagneres-de-Louchon. Además, Froome siempre ha sido tremendamente respetuoso con el mito del Tour y la posibilidad de asociar su nombre de forma indeleble con una subida que va camino de convertirse en mito -como ya hizo en Mont Ventoux el año pasado- es un imán para él.
Lo cierto es que nadie espera "grandes diferencias", como reconoce Xabier Artetxe, miembro del equipo técnico del Sky, -"20 o 30 segundos entre los favoritos", aventura el propio Froome-, pero a favor del británico juega el hecho de que conoce a la perfección la ascensión a la estación de esquí de los Vosgos. Eso sí, si de poner peros se trata, Froome ha variado este año su preparación previa al Tour, esa en la que siempre ganaba el Criterium del Dauphine Libéré, con lo que ha retrasado su pico de forma en la ronda francesa y, quizás, sólo quizás, no esté en condiciones óptimas para atacar desde la primera oportunidad.
Contador, Nairo y Porte
El mismo día que Vincenzo Nibali se coronaba en la segunda ascensión a La Planche des Belles Filles (2014), Alberto Contador sufría una caída y se veía obligado a abandonar, lo que le lleva a tener aún más respeto al primer coloso de este 2017. "Es una subida bastante espectacular, corta pero con mucha pendiente. Además, empieza a hacer calor y en la primera de montaña siempre suele hacer sorpresas. En función de como vayamos decidiremos la táctica", señaló. Apunta el español a lo que piensa la mayoría, pues en la primera subida desaparecerán las caretas y quien vaya justo de fuerzas dirá adiós a cualquier opción ya en la primera semana.
"Nos conformamos con que Nairo Quintana esté entre los mejores". No creen en Movistar, ya huérfanos de Alejandro Valverde, quien en 2012 lo intentó desde el principio para sucumbir a las piernas de Froome, Evans y Wiggins en los kilómetros finales, que sea esta la ascensión de su jefe de filas, así que lo mejor es nadar y guardar la ropa porque "seguro que habrá algún escalador que no tenga las piernas predispuestas".
Otra forma de afrontar la ascensión es la de Richie Porte. Quien fuera gregario de Froome y ahora jefe de filas del BMC conoce a la perfección al británico y como ahora se le considera un firma candidato a desbancar al que fuera su líder, el discurso es diferente: "Es una forma de actuar inteligente -la de Froome atacando desde el principio-, pero ya nos lo sabemos. No nos pillará por sorpresa. Aunque Froome gane unos segundos no vamos a cambiar nuestro planteamiento".
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