La etapa de transición del Tour (Blagnac - Rodez, así se la hemos contado en directo) entre el hachazo de Landa del viernes y la peligrosa etapa montañosa de este domingo fue más significativa de lo esperado. Los continuos repechos del macizo central, en una etapa con perfil de 'Clásica', dieron atractivo al último tramo de la etapa, protagonizado por Thomas de Gendt, que se escapó de los cuatro compañeros de fuga para buscar en solitario el sueño de la etapa.
El belga fue finalmente capturado por el pelotón a diez kilómetros de la meta. Se sucedieron entonces diversas escaramuzas, y cuatro corredores (Maurits Lammertink, Pierre-Luc Perrichon, Damiano Caruso y Nikias Arndt) rodaron adelantados unos kilómetros. Pero el grupo llegó, como suele suceder, junto al último y durísimo kilómetro de la jornada. Los favoritos se habían colocado por delante para evitar sorpresas. Gilbert, Boasson Hagen y Van Avermaet atacaron, pero fueron finalmente sobrepasados por Matthews, que entró en la meta con insultante facilidad y consiguió su segunda victoria de etapa en la ronda francesa.
Froome y el colombiano Rigoberto Urán lograron una cierta ventaja con respecto a los otros postulantes a la clasificación general. Aventajaron en 4 segundos al francés Romain Bardet, en 14 al español Mikel Landa, en 21 al colombiano Nairo Quintana y al español Alberto Contador, y en 25 a Fabio Aru.
El británico del Sky lo recupera con una renta de 19 segundos respecto al transalpino del Astana, de 23 con Bardet y de 29 con Urán, que está a seis segundos del podio. Quintana es octavo a 2.22 y Alberto Contador, décimo a 5.37 del líder [Así está la clasificación general del Tour].
Froome, exultante tras recuperar el 'maillot' amarillo.