El director de la empresa organizadora del Tour de Francia, Christian Prudhomme, ha asegurado en una entrevista a la televisión australiana SBS que no entiende cómo no hay aún una decisión final sobre la posible sanción de Chris Froome que le impediría participar en la próxima edición de la carrera francesa. "Necesitamos una respuesta por parte de la UCI, o al menos alguna aclaración. Sin claridad, es bastante evidente que perdemos todos".
El corredor británico de Sky está en boca de todos desde que en septiembre diera positivo por salbutamol tras la última edición de la Vuelta ciclista a España. Sin embargo, y a pesar de que las dos muestras recogidas confirmaron el positivo, Froome quiere volver a correr en Francia. Ganó en 2014, ganó en las tres últimas ediciones y este año podría vestirse su quinto maillot amarillo.
Aunque algunos ciclistas han pedido que no corra para que la prueba no pierda credibilidad, ninguna institución le ha prohibido aún su participación.
"El ciclismo funciona como cualquier otro deporte. No se puede imaginar que la FIFA no organice la Copa del Mundo y es la FIFA quien hace las reglas y se asegura de que se respeten. Somos los organizadores del Tour pero nosotros no hacemos las reglas". Así se ha defendido Prudhomme, quien ha apuntado a las responsabilidades de David Lappartient, presidente de la UCI (Unión Ciclista Internacional). Según ha asegurado, lleva pidiendo una resolución desde septiembre y es la UCI quien debe tomar la última decisión
A un mes de que comience la carrera anual más importante del ciclismo, el futuro de Froome aún no está decidido. Dado de que en el ciclismo no existen sanciones preventivas, solo un veredicto claro puede impedir la participación del corredor de Sky. Sin veredicto, él podrá seguir compitiendo.