Cavendish sigue con su idilio en el Tour de Francia: ya está a una victoria de Eddy Merckx

Lo de Mark Cavendish en este Tour de Francia es de locos; 'Hat-Trick' de 'Cav' en la 'Grande Boucle'. El cohete de la Isla de Mann consigue su tercera victoria en la llegada de la décima etapa en Valence. Un gran lanzamiento de Morkov le colocó perfectamente, mientras que Wout Van Aert y Jasper Philipsen se colocaron a su rueda y estuvieron a punto de superar al 'recordman' del Deceuninck. Tadej Pogacar sigue siendo el líder de la general.

34 - 33, así va el marcador por ser el ciclista que más victorias ha conseguido en la historia del Tour de Francia. Eddy Merckx dejó una histórica marca que completó con cinco triunfos en la general, así como otras tantas hazañas que en la última semana se están recordando para remarcar para señalar las diferencias entre ambos. Bueno, en realidad las está sacando el belga para defenderse como el mejor ciclista que ha pisado esta prueba.

En cualquier caso, lo del británico no tiene parangón. La temporada pasada se arrastraba con el Bahrain - McLaren por las carreras sin un nivel competitivo para el primer nivel. Su fichaje por Deceuninck parecía más un homenaje que un movimiento para que este equipo siga siendo el que más gana de todo el pelotón. Económicamente, el británico decidió que le dieran el mínimo posible. Él está dando el máximo, como se vio en la llegada de Tignes.

Este martes la lucha encarnizada solo hizo que encumbrar aún más su figura. La realidad es que el trabajo de su 'treno' fue tremendo. Él mismo lo decía en la entrevista tras la etapa: "Me siento humilde. Dispongo del vencedor de Flandes (Asgreen); del campeón mundial, que lució el maillot amarillo (Alaphilippe); de Michael Morkov, oro mundial y europeo en pista; y del ganador del Omloop Het Nieuwsblad (Ballerini), que uno a uno se matan por mí, como en Tignes. Remato por ellos".

Día nervioso

Aunque no hubo grandes problemas durante la etapa, alguna caída tuvo su relevancia. El día empezó algo lluvioso y la amenaza permaneció durante el resto de la jornada. Pero sobre todo fue el viento el que movió la carrera. Tosh van der Sande y Hugo Houle fueron la única escapada que permitió el pelotón. Esta fue reducida a 36 kilómetros de meta y ahí comenzaría una interesante guerra en el pelotón que casi da un susto a alguno.

El Deceuninck domina el arte de provocar abanicos, y para ello tira de artillería pesada, como un campeón del Mundo como Julian Alaphilippe de locomotora. Ese movimiento puso las orejas tiesas a los equipos de la general. El Ineos puso delante a Carapaz y el propio líder, Pogacar, vigiló de cerca los acelerones que terminaron de reducir el pelotón a 50 unidades. Tras unos instantes de tranquilidad, de nuevo Eolo sopló a 16 de meta. Los hombres de Cavendish de nuevo al azote, con respuesta de Carapaz. Delante estaban los 10 primeros de la general, nadie quedó atrapado por un abanico que no resultó letal.

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