Emily Bridges ha estallado. La ciclista transexual británica se ha convertido en una de las grandes protagonistas de los últimos días en el deporte mundial. El caso Lia Thomas ha pasado ahora a estar encarnado por su figura después del enfrentamiento que ha mantenido con la Federación del Reino Unido y con la UCI.
La corredora fue incluida en la lista de corredoras aptas para disputar los nacionales de Gran Bretaña. Sin embargo, poco tiempo después, la Unión Ciclista Internacional se puso a estudiar el caso y terminó denegando su participación, ya que consideraban que no era justo que compitiera entre féminas dados sus antecedentes.
Tras estos momentos de dudas e indecisiones, Emily ha decidido romper su silencio para denunciar la complicada situación que está viviendo. A través de un impactante comunicado, primero ha mostrado su sorpresa por no poder competir en el campeonato nacional, lo cual era una de sus grandes ilusiones en esta temporada 2022.
"He proporcionado tanto a British Cycling como a la UCI evidencia médica de que cumplo con los criterios de elegibilidad para ciclistas transgénero, incluido que mi límite de testosterona ha estado muy por debajo del límite prescrito por las regulaciones durante los últimos 12 meses. A pesar del anuncio público, todavía tengo poca claridad sobre su decisión sobre mi inelegibilidad".
Por si esto fuera poco, la ciclista transexual del Reino Unido ha denunciado también el trato que ha recibido por parte de algunos medios de comunicación y por parte de aficionados que han criticado y faltado el respeto a su figura. Ella se considera una deportista más y como tal se merece todo el respeto del mundo. Sin embargo, muchos han aprovechado para volcar su odio contra ella y demostrar su bajeza.
La denuncia de Emily
"Soy una deportista y solo quiero volver a competir de nuevo. Nadie debería tener que elegir entre ser quienes son y participar en el deporte que aman". Una denuncia muy clara de Emily que narra cómo ha sido perseguida en los últimos días después de que su caso se viralizara y se hiciera mundialmente conocido, algo que no está sabiendo afrontar y que le está produciendo una cierta ansiedad y un claro hándicap a nivel mental.
"He sido implacablemente acosada y demonizada", denuncia en referencia al trato que ha recibido por algunos medios de comunicación, de quienes ha afirmado que "habían escrito historias sobre ella para aumentar su tráfico".
Por último, asegura que nadie ha pensado en ella ni en las personas que se encuentran en una situación parecida a la suya o a la de Lia Thomas. Cree que hay que recordar siempre que detrás de ciertas noticias o de algunas polémicas, también deportistas sienten y padecen por sus vidas y por sus carreras: "Todo esto es sin preocuparse por el bienestar de las personas o grupos marginados, y otros quedan para recoger los pedazos debido a sus acciones. Mi privacidad ha sido totalmente violada por la especulación sobre mi elegibilidad y equidad para competir".
[Más información: Cisma en el ciclismo por la normativa trans: la UCI impone su criterio pese al rechazo del Reino Unido]
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