Karim Benzema ha estado en la mañana del miércoles bajo custodia policial en París para prestar declaración por presunto chantaje sexual a su compañero en la selección Mathieu Valbuena. El pasado junio, el jugador del Olympique de Lyon interpuso una denuncia mientras estaba concentrado con el combinado francés. Valbuena aseguraba haber recibido una llamada anónima en la que se le pedían 150.000 euros a cambio de no difundir por internet un vídeo sexual en el que él estaba presente.
El nombre de Benzema habría aparecido en escuchas telefónicas dentro de la investigación que el Tribunal de Versalles comenzó por intento de extorsión de fondos. Djibril Cissé ya fue liberado sin cargos por el mismo caso el pasado 13 de octubre tras declarar junto a otros tres detenidos. El delito está penado con hasta cinco años de cárcel.
Pasión por la velocidad
No es el primer caso judicial en el que se ve envuelto el delantero del Real Madrid, que acumula ya un historial de encuentros con la justicia. Sin ir más lejos, la semana pasada fue interceptado por la Policía Local de Madrid al realizar un giro prohibido en la glorieta de Atocha.
Más adelante se demostró que si tenía el carné, algo que en el momento puso en cuestión. Es uno de los problemas que ha tenido Benzema al volante, pero no el más llamativo. En junio de este mismo año le fue imputado un delito contra la seguridad vial por no llevar carné mientras conducía cerca del aeropuerto de Madrid.
Sus problemas con los coches en territorio español empezaron en el 2009. Pocos meses después de llegar al Real Madrid y tras un Clásico en Barcelona, Benzema estrelló su coche contra una valla y un árbol en La Finca, urbanización donde residía dentro del municipio de Pozuelo de Alarcón. Apenas un mes después, en Navidad, el jugador volvió a tener un accidente. En esta ocasión en Isla Reunión, un departamento de ultramar francés, donde celebraba su cumpleaños. Benzema conducía un Porsche Carrera y frenó para evitar chocar con un Lamborghini en el que iban dos amigos suyos. La acción provocó que sus amigos acabasen estrellados contra un muro de hormigón.
Dos años más tarde, en junio de 2011, el francés volvió a tener problemas conduciendo. 250 euros pagó como sanción por practicar carreras en Ibiza, superando el límite de velocidad. Hace dos años, en 2013, se celebró un juicio en el que el jugador francés fue multado por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Pozuelo de Alarcón. Benzema había estado conduciendo a 216 km/h en una vía con un máximo permitido de 100. 18.000 euros tuvo que abonar, además de retirársele el carné durante ocho meses. En ese caso la pena podía haber ascendido a un periodo de entre tres y seis meses de cárcel en prisión.
Caso Zahia
Ya en 2014 acabó el caso judicial más popular entre los que ha vivido Benzema. Él y su compañero en la selección, Franck Ribéry, fueron absueltos del caso Zahia. Ambos estaban acusados de haber contratado los servicios de una prostituta menor de edad. Aunque el juez sobreseyó el caso del cuñado de Ribéry, otros cinco acusados fueron condenados a penas de entre tres meses y dos años de cárcel por proxenetismo.
Fueron cuatro años de procedimiento judicial que se hicieron públicos antes de comenzar el Mundial de 2010. Benzema negaba haber mantenido relaciones con Zahia en 2008, como se le acusaba. Ribéry, por su parte, reconoció el hecho ocurrido en 2009 aunque negó que supiera que era menor de edad (17) cuando ocurrió, ni que era prostituta. Después de que ambos fueran imputados, Ribéry fue esposado al ser llevado al Palacio de Justicia.