Neymar Jr. tiene sólo 23 años, pero únicamente existen cuatro futbolistas que hayan marcado más goles que él con la selección canarinha: Pelé, Ronaldo, Romario y Zico. El 11 del Barcelona ha superado todas las sospechas. Es el heredero del fútbol brasileño en el peor momento de su historia y está ya considerado oficialmente como uno de los tres mejores futbolistas del planeta. Enfila el final de año plenamente asentado en el tridente inmejorable de un equipo triunfador y estético.
El atacante culé ha mostrado una inteligencia asombrosa (como Luis Suárez) para acoplarse a Leo Messi y desarrollar su talento al máximo sin causar problemas de convivencia entre egos. Sólo los frentes judiciales abiertos por su fichaje del Santos al Barcelona en mayo de 2013 ensombrecen el futuro cercano del genio del balón nacido en Mogi das Cruzes, São Paulo, el 5 de febrero de 1992.
DUDAS INICIALES
Hace tres años, cuando el nombre de Neymar empezaba a sonar con fuerza para varios clubes europeos, aparecieron numerosos detractores de un jugador que había conseguido ya la Copa Libertadores antes de dar el salto al Viejo Continente. Los críticos ponían en duda no sólo al jugador, sino también al torneo Brasileirao, categorizando la competición como una liga muy menor en comparación con las europeas. Y siendo esa afirmación cierta, no todos los jugadores cotizados que cruzan el Atlántico dan la talla en Europa (véase, sin ir más lejos, Lucas Silva). Impecable en todos los parámetros que se le piden a un jugador de ataque, Neymar lo tenía todo en Brasil, además de haber ganado los títulos más importantes con tan solo 21 años.
Años después, comparado con fichajes rimbombantes que nunca alcanzaron el nivel esperado (Robinho o Alexandre Pato, por ejemplo), el futbolista criado en la cantera del Santos ha acallado cualquier reproche a base de goles y asistencias en partidos decisivos. Sus cifras esta campaña son espeluznantes: 16 goles y 11 asistencias en tres meses de competición.
La primera temporada en el Barça, 2013-14, fue la menos productiva de su carrera en cuanto a goles. En aquel entonces compartía delantera azulgrana con Messi y el chileno Alexis Sánchez, sin un '9' puro arriba.
El jugador terminaría anotando 9 goles y repartiendo 8 asistencias en Liga en una temporada de adaptación, previa a un Mundial y que resultó cuando menos controvertida a nivel personal (denuncias por su fichaje) y deportivo (el 'Tata' Martino dimitiría a final de año).
EL TRIDENTE Y LUIS ENRIQUE
La llegada del entrenador asturiano al banquillo blaugrana y de Luis Suárez al puesto de delantero centro provocó la explosión deportiva de Neymar. 22 goles y 7 asistencias en Liga, más otros 10 tantos en Champions League, terminarían siendo cruciales para la conquista del triplete: Liga, Champions y Copa del Rey en paralelo al desplome del Madrid de Carlo Ancelotti.
Es difícil recordar un jugador sudamericano que se haya adaptado con tanta rapidez y personalidad al fútbol europeo. En aquella temporada, por cada 90 minutos de juego, Neymar remataba 3.3 veces a portería, colocando el 48% de esos disparos entre palos y convirtiendo el 23% de ellos en gol. Cifras de una superestrella en toda regla.
Esta temporada, el brasileño está ahora mismo en cifras generales (más allá del número de goles) nunca vistas en alguien de 23 años: genera más de cuatro ocasiones para sus compañeros y anota uno de cada cinco disparos. Neymar ha estallado estos dos meses ante la ausencia de Messi. Cuasi-perfecto en todos los aspectos del juego, como se puede observar en el gráfico posterior, Neymar se asocia con sus compañeros sin aparente esfuerzo: reparte más de tres pases clave por encuentro. Sus actuaciones estelares han dejado de ser noticia.
Antes de su lesión, en septiembre, el rendimiento de Messi estaba siendo sencillamente estratosférico. El acelerón de juego experimentado por el brasileño durante los dos meses de ausencia de la Pulga, en plena transición de Cristiano Ronaldo, le coloca como el gran candidato a dar la sorpresa.
METODOLOGÍA
Los gráficos de tela de araña o radar sirven para mostrar en una rápida instantánea varias estadísticas del jugador en cuestión. La visualización está hecha a escala según el valor de la métrica, puntuando al jugador según la desviación estándar de La Liga en ese valor. Por ejemplo, a partir del 90% de pases completados para un defensa, la visualización cubre todo el marco del radar, pues el jugador ya está una desviación estándar por encima del resto.
La visualización está hecha de tal forma que un jugador perfecto –muy rara vez ocurre- ocupe una esfera completa. Las estadísticas marcadas como invertidas (invs) están de esa manera por eso mismo, para que la amplitud sea representada como mejor y no al revés. El parámetro NPG90 (non-penalty goals per 90 minutes) son los goles por noventa minutos excluyendo penas máximas.