Francisco Rubio, presidente del Comité de Competición de la RFEF y juez único del mismo, ha decidido expulsar al Real Madrid de la Copa del Rey después de que el equipo de Rafa Benítez incurriese en alineación indebida al hacer jugar a Denis Cheryshev, que arrastraba una sanción por acumulación de tarjetas de la pasada temporada, cuando jugaba cedido en el Villarreal.
Una decisión que, en vista de los precedentes -Osasuna esta misma temporada sin ir más lejos-, condenaba al conjunto blanco a la eliminación fulminante después de que el Cádiz presentase la pertinente denuncia y a pesar de las alegaciones que el Real Madrid habría presentado escudándose en el artículo 41 del Código Disciplinario de la RFEF (comunicación personal al afectado) y, en su defecto, en el artículo 112 del mismo código (fin de ciclo de acumulación de tarjetas desde treintaidosavos de final).
La sanción en cualquier caso es apelable y Florentino Pérez, en su segunda rueda de prensa en apenas una semana, reconoció que llegarían hasta el Tribunal de Arbitraje (TAD) si fuera necesario.
Una vez eliminado de la competición por el juez único, el Real Madrid puede presentar un recurso ante el Comité de Apelación de RFEF, que se reúne el próximo miércoles. Y en caso de recibir otra decisión contraria a sus intereses podría entonces recurrir como última opción ante el TAD, cuya próxima reunión es el próximo viernes 11 de diciembre.