El fútbol sudamericano terminó 2015 descabezado y abierto en canal (la mayoría de sus presidentes federativos encarcelados, procesados y/o extraditados), pero el cambio de año y la elección de una nueva directiva apenas se nota. La Confederación Sudamericana de Fútbol (CONMEBOL), gran protagonista de los casos de corrupción FIFA, ha vuelto a soliviantar al continente entero con una medida extravagante firmada por su todavía director general, Gorka Villar (hijo del presidente de la Federación Española de Fútbol), firmante de una amnistía que reduce a la mitad las penas aplicadas a jugadores y a una tercera parte los de los clubes con sanciones pendientes, con el insólito pretexto de festejar los 100 años de la institución.
Villar es un apellido muy conocido en el fútbol latinoamericano, donde las sospechas de corrupción en su actividad encuentran lugar con frecuencia en periódicos y televisiones: el padre (actual vicepresidente de la FIFA y cabeza del fútbol español desde 1988) por su cercanía a Joseph Blatter y Michel Platini; el hijo (asesor desde 2011, director general desde 2014) por sus negocios, que ya le han granjeado una denuncia por extorsión ante la Justicia uruguaya, acusado por ocho clubes (incluido Peñarol) a propósito de la venta a la baja de los derechos televisivos de la Copa Libertadores: los habría amenazado para que levantaran las denuncias en contra de la CONMEBOL.
Revuelo continental
La polémica decisión de Villar (de aplicación inmediata) ha enardecido al continente, especialmente por beneficiar enormemente a uno de los clubes más populares y poderosos del Cono Sur, Boca Juniors, que ve muy rebajada su pena de jugar ocho partidos sin aficionados por los graves incidentes del Superclásico del año pasado contra River Plate (un hincha le aplicó gas pimienta a los jugadores de River): serán finalmente solo dos encuentros.
Las consecuencias de tanta magnanimidad imprevisible han sido inmediatas: uno de los integrantes del tribunal de disciplina deportiva que sentenció inicialmente a Boca, el uruguayo Adrián Leiza, dimitió tras conocerse la resolución. "Esto no es un fallo, esto es una resolución política. La amnistía no figura en el Estatuto de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), es ilegítima. Hay una interferencia de lo político", aclaró después en una entrevista con Radio La Red.
Caudillos futbolísticos
En Sudamérica, hasta 2015, pervivían en cada país caudillos futbolísticos con varias décadas de poder absoluto. La propia sede de la CONMEBOL (en Asunción, Paraguay) tenía, aunque cueste creerlo, inmunidad diplomática y gozaba de inviolabilidad.
El ex presidente de la CONMEBOL, Eugenio Figueredo, fue extraditado en diciembre desde Suiza (donde estaba detenido desde mayo de 2015) a su país, Uruguay, para aclarar más de 20 años de corrupción en la Confederación Sudamericana de Fútbol. Su testimonio salpica a decenas de dirigentes del futbol mundial, incluido Gorka Villar, señalado explícitamente como el encargado de “extorsionar” a los directivos de siete equipos de fútbol uruguayo que en 2013 se unieron a una denuncia penal contra la CONMEBOL (a la que acusaban de formar una “organización criminal” para estafar a los clubes y quitarles parte de sus derechos de retransmisión televisiva).
Según el diario paraguayo Abc Color, el hijo de Ángel María Villar se habría llevado 500.000 euros de la institución que dirige por "trabajos" no aclarados, además de quemar archivos que le comprometerían en un futuro.
"Cerebro de la mafia corrupta"
Uno de los ídolos del país guaraní, el ex portero internacional José Luis Chilavert, fue mucho más allá y afirmó en una entrevista reciente con Radio MARCA que Gorka Villar "es el cerebro de la mafia corrupta que ha gobernado el fútbol sudamericano. Es el mayor sinvergüenza de todo esto, el cerebro, un participante más, un cómplice de todos los casos de corrupción que ha habido estos años, de todos esos dineros sucios que han agarrado. No en vano, por eso todos esos dirigentes están presos", remachó Chilavert.
"Es incalculable la cantidad de dinero desviada en la CONMEBOL", afirmó este jueves en el diario brasileño Globo.com el fiscal uruguayo Juan Gómez, especializado en el crimen organizado, que participa en la macroinvestigación abierta desde que el FBI y la Justicia estadounidense decidiesen tomarse en serio este asunto con motivo de irregularidades descubiertas en la preparación de la Copa América Centenario 2016, que se celebrará este mes de junio en el país norteamericano.
"Acusado en Uruguay, Gorka Villar es quien manda en la nueva CONMEBOL", titulaba el miércoles uno de los principales periódicos de Brasil. Villar fue poderoso durante los mandatos de Leoz, Figueredo y Napout (todos ellos presos hoy). La primera decisión de Alejandro Rodríguez, el nuevo presidente del fútbol sudamericano, también ha estado firmada por Gorka Villar.