Morata se gana la Eurocopa
El canterano del Madrid brilla en la Juventus y reclama el lugar del '9' (tras su soberbia actuación ante el Bayern) en una selección sin delantero fijo. Del Bosque da la última lista antes de Francia.
18 marzo, 2016 01:00Noticias relacionadas
Empezó la temporada como la pasada, sin ganarse la titularidad en la ‘Juve’, pero ha vuelto a ser decisivo en el tramo crucial de la competición más importante del calendario. Su entrenador en Turín, Massimiliano Allegri, había avisado de que el madrileño traía una forma física “extraordinaria”: y Morata lo demostró reventando al Bayern durante los 70 minutos que jugó en Múnich.
Marcó un golazo justamente anulado (de vaselina) y protagonizó una jugada propia de Leo Messi (cuando mide 1,90), deshaciéndose de germanos durante 55 metros, hasta cederle a Cuadrado uno de los goles del año: recorte, defensa sentado, balón a la escuadra y un 0-2 que ponía la herencia alemana de Pep Guardiola en estado de revisión perpetua. “Inexplicable el cambio de Morata por Mandzukic. Echó de menos un tesoro en la última media hora después de una hora incordiando”, escribía en la resaca del maravilloso duelo de octavos el rotativo turinés Tuttosport.
Las grandes noches europeas han confirmado el potencial de aquel joven espigado (hoy tiene 23 años) que salió como tantos otros canteranos del Real Madrid para encontrar minutos. Desde que fichara por la Juventus, ha mostrado en Champions League el carácter y el linaje de un delantero polivalente, técnico, oportunista y con un punta de velocidad inesperada para un jugador de su altura.
Toda duda generada en el 'Calcio' desaparece en Europa. El curso pasado, tras una primera fase titubeante, logró cinco goles y dos asistencias en siete duelos frente a rivales formidables: Borussia Dortmund, Real Madrid y Barcelona (el 13 de mayo de 2015 marcó el gol que eliminó a su antiguo equipo, el Real Madrid, en la vuelta de las semifinales de Champions, además de haber puesto el 1-0 en el duelo de ida). Su tremenda demostración en Baviera, sólo 36 horas antes de que Vicente del Bosque dé la última lista previa a la convocatoria definitiva para la Eurocopa, le sitúa como máximo favorito para ocupar un puesto que sigue sin dueño desde la ‘jubilación’ de David Villa: el delantero centro de una selección que sabe jugar sin ariete.
Las dudas sobre Diego Costa
Morata entró en la última convocatoria de España (octubre de 2015) en lugar del sancionado Diego Costa, que en aquel momento ya fue (suavemente) reprendido por Del Bosque debido a una de sus cíclicas salidas de tono. El seleccionador habló sobre el jugador juventino, sabedor de su calidad, pero afirmó con claridad que pedía “un poco más” a un futbolista del que esperaba lo máximo. La exhibición bávara de Morata ha coincidido con otra polémica sobre Costa, probablemente la gota que colmará la paciencia del marqués tras haber apostado sin descanso por el hispanobrasileño, ese ‘buen chico’ que se transmuta sobre el césped.
Sólo Aritz Adúriz (32 goles en lo que va de temporada) parece estar en condiciones de competir con Morata por la punta española, pese a las reticencias del seleccionador a convocar prematuramente a un futbolista de 35 años que podría resentirse de cualquier problema físico y no recuperarse con la velocidad suficiente. El clamor popular por la presencia del delantero vizcaíno crece: su posible inclusión en los amistosos contra Italia y Rumanía es uno de los mayores atractivos de la rueda de prensa del viernes, en especial después del gol determinante contra el Valencia.
Otros nombres con posibilidades legítimas son Borja Bastón (16 tantos y 2 asistencias en 24 partidos con el Eibar) y Lucas Pérez, que acusa en la segunda vuelta el descenso colectivo del Deportivo de la Coruña. Pero el partido de Morata en Múnich, superlativo hasta su incomprensible sustitución, le coloca definitivamente entre los atacantes de la selección y como máximo candidato a la titularidad en un equipo que Del Bosque quiere dejar renovado tras la inevitable retirada de la ‘generación dorada’. No es habitual ver partidos de auténtica élite donde un jugador tenga semejante nivel de influencia y gravitación.
¿Vuelta al Bernabéu?
En la Juventus Morata perdió esta temporada la titularidad en favor de Paulo Dybala, la última ‘perla’ del fútbol argentino: ha entrado como suplente, de hecho, en 18 de los 29 partidos ligueros disputados. Pero determinadas demostraciones, en el lugar y momento idóneos, confirman a los ‘cracks’. A tres meses de una esperada y profunda renovación en la plantilla del Real Madrid, la reciente reciente revelación de Football Leaks (que publicó su contrato) había vuelto a poner sobre la mesa su posible regreso a Chamartín. Costaría 30 millones repescarlo. Por lo visto en Múnich, y comparado con otras recientes adquisiciones, un negocio razonable para un chico de la casa que estuvo a punto de estropear la leyenda del mismísimo Pep Guardiola.