"Un central valiente". De esta manera describe el Real Madrid en su página web a Pedro de Felipe, que este martes, en vísperas del encuentro de los blancos contra el Wolfsburgo, ha fallecido a los 72 años. El que defendiera el escudo del conjunto de Concha Espina desde la temporada 1964 hasta la 1972 fue designado como el sucesor de Santamaría. Palabras mayores ante las que respondió con esa decisión y vigor que le caracterizaron.
Esas cualidades le llevaron a ser con todos los honores miembro del Real Madrid 'Yé-yé'. La labor de este canterano, de los de antes, era guardar las espaldas de los Amancio, Pirri y Gento. Precisamente junto al cántabro logró De Felipe la sexta Copa de Europa para las vitrinas del Santiago Bernabéu. Se trató de la primera en seis años tras cinco consecutivas. Y también fue la última hasta que 32 años después Pedja Mijatovic acabó con la sequía.
En aquella defensa le acompañaban Pirri y Sanchís padre, otras dos leyendas merengues. La solidez de aquella retaguardia permitió a De Felipe alzarse con cuatro campeonatos ligueros. Suficiente para dominar el panorama nacional en la década de los 90. Además de estos títulos logró la Copa del Rey, que entonces era conocida como Copa de España.
Hay dos jugadas por las que De Felipe es recordado como protagonista y ambas cuentan con lesiones. La primera jugada ocurrió en la primera jornada de la campaña 69-70. La Liga comenzaba con un Clásico, con visita del Barcelona. En una acción en el área blanca De Felipe golpea a Bustillo, un delantero azulgrana que queda tendido. La jugada sigue y el Real Madrid no echa la pelota fuera, esperando a que sea el árbitro quien detenga el juego. Finalmente Bustillo acaba con una ruptura completa de ligamento lateral interno de la rodilla izquierda con posible lesión meniscal.
El choque acabó en empate (3-3) pero tuvo trascendencia más adelante. De Felipe no fue sancionado y las reclamaciones acabaron llegando a la Delegación Nacional de Deportes presidida por Juan Antonio Samaranch. Allí deciden, tras ver 20 veces la repetición del NO-DO, que la jugada es accidental. El propio Bustillo lo certificó dos décadas más tarde: “Quedé con los pies trabados y al no poder articular bien el movimiento salté por encima de De Felipe pero caí en mala postura”. El delantero no jugó más ese año y los dos siguientes disputó un encuentro cada uno.
La segunda sucedió en octubre de 1973, en Estambul, durante la única convocatoria como internacional del defensor blanco. Aquel día se rompió el menisco y tuvo que estar varios meses de baja tras pasar por el quirófano.
El canterano blanco fue uno de esos jugadores que dan identidad a un club. El nombre de Yé-yé se lo dieron a esa generación de jóvenes futbolistas en referencia a la canción 'She Loves You' de The Beatles. Y De Felipe fue un gran ejemplo de esa personalidad.
Tras sus años en el Real Madrid, pasó otras seis campañas en el Espanyol antes de retirarse. Desde entonces dedicó su tiempo a ser agente de futbolistas. Su capilla ardiente se instalará en el Sanatorio de Tres Cantos a partir de las 11:00 horas.