No es sencillo que un alemán pronuncie correctamente la palabra “Atlético”. Y tampoco que entienda la tradición que acoge el club. Sin embargo, en algunos diarios lo están intentando. Casi siempre con suerte, acogiéndose al 'Cholismo' como religión suprema e intentando explicar como un club “obrero” puede llegar a codearse con el todopoderoso (y siempre rico) Bayern de Múnich. ¿Qué pasará? La solución: este miércoles en el Calderón (20:45 horas). Mientras tanto, aquí tienen una muestra sobre cómo piensan los germanos.



Sobre el club



Die Welt: “Para el Atlético, el club de los trabajadores del sur de Madrid, la lucha es siempre más importante que la pintura y siempre se premia el juego de contraataque sobre el control de la pelota. Esa es la esencia”.



Süddeutsche Zeitung: “El Atlético son once jugadores que operan en una trinchera. Cada bola es una batalla; cada partido una lucha existencial. 'Partido a partido', reza el credo de Simeone”.



“La misión del Atlético (en el partido contra el Bayern) se llama exorcismo”.

"El Atlético, un monstruo con diferentes cabezas. Se le puede presentar como una hydra rojiblanca. Tiene diferentes sistemas y su idea de juego funciona mejor contra grandes rivales que ante pequeños".



TZ München: “Los conceptos futbolísticos de ambos entrenadores son completamente diferentes. Mientras que para el técnico del Bayern todo ocurre en el centro del campo, para Simeone la importancia está en la fuerza, la dureza y la disciplina táctica”.



Sobre Simeone



Die Welt: “Simeone dirige desde el área técnica una ópera de pasiones”.



“Simeone es el gurú. Él ha desarrollado un camino mesiánico, que es el éxito, que se construye bajo un tipo de religión, el 'Cholismo'. Esa fue elegida la palabra del año en España en 2013”.



Süddeutsche Zeitung: “Es el hombre que es responsable de que el Calderón, a orillas del Manzanares, ofrezca ese hipnótico e infernal sonido. Ese hombre se llama Diego Pablo Simeone”.



TZ München: Simeone, que encaja en el concepto de trabajo, trabajo y más trabajo, tiene los valores del club tradicional de los barrios del sur de la capital de España. Su estrategia defensiva sacó al Atlético de la crisis, construyendo los éxitos de ahora con las recetas del pasado”.

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