James cumple 25 años este 12 de julio y en unas semanas se incorporará a la pretemporada en la que será su tercera campaña en el Real Madrid CF. Hace dos años, y tras un Mundial excelente en el que fue el máximo goleador del torneo, Florentino decidió apostar por el ‘Niño Maravilla’, apodo que le sacaron en su país por su cara juvenil.
85 fueron los millones que tuvo que desembolsar Florentino Pérez -tras no llegar a un acuerdo de renovación con Ángel Di María- para hacerse con los servicios del que entonces era jugador del AS Mónaco. Corría el verano de 2014 y el presidente del Madrid dejó salir por 75 millones al ‘Fideo’ argentino, Di María, jugador que en 2014 fue clave en la conquista de la tan ansiada Décima. Un ‘cambio de cromos’ al fin y al cabo.
En estos dos años el Madrid ha ganado una Supercopa de Europa y el Mundialito de Clubes, títulos ‘menores’ en el panorama futbolístico. El único título que ha ganado en un torneo de más de tres partidos es la ‘Undécima’, una Champions League en la que James no ha sido decisivo ni mucho menos.
Primera temporada notable
No cabe duda que James Rodríguez comenzó de manera brillante su andadura en el Real Madrid. En su primera temporada, el curso 2014-2015, un Madrid de récord logró 22 victorias consecutivas en todas las competiciones, una racha que frenó en enero de 2015 el Valencia en Mestalla. Justo un mes después se lesionó ante el Sevilla en el Santiago Bernabéu.
Durante el periodo de recuperación del colombiano, su equipo dejó escapar la Liga tras perder ante el Atlético de Madrid (4-0), Athletic de Bilbao (1-0) y Barcelona (2-1). En el Camp Nou perdieron un liderato que el Barcelona logró mantener hasta el final. Cierto es que en esa temporada el Madrid no ganó ningún título, pero los números de James fueron bastante buenos en Liga: 2292 minutos en 29 partidos de titular en los que metió 13 goles y dio 13 asistencias.
Su suerte cambió en hace unos meses. En esta última temporada, desde la entrada de Casemiro en el equipo y la mejora del mismo con Kroos y Modric a los flancos del brasileño, James se ha quedado sin sitio en el 11 titular. El tremendo nivel que han mostrado el alemán y el croata, junto a una BBC intocable para Zinedine Zidane, y antes con Benítez y Ancelotti, ponen muy complicadas las cosas para el colombiano.
No solo Kroos y Modric, sino Isco también está por delante de James. El colombiano suele ser la segunda o incluso tercera opción para Zidane. Es a día de hoy el decimoquinto jugador más importante -o menos, según se mire- de la plantilla madridista, ya que es el decimoquinto jugador con más minutos. El decimoquinto en importancia, dicho de otro modo.
Tras sus idas y venidas con Benítez, tampoco logró convencer a Zidane para el 11 titular. De hecho, parece que Isco le tiene ganada la partida al colombiano, tal y como se vio en Milán ante el Atlético de Madrid. James se quedó sin jugar mientras que Isco entró en el segundo tiempo. Esta temporada no ha sido buena para James (1517 minutos, 7 goles y 8 asistencias en Liga) con el Madrid.
Esta situación ha provocado que se llegue a hablar de un posible traspaso de James a la Premier League. Ha habido más de un rumor sobre una venta al Manchester United de Mourinho, el City de Guardiola o el Chelsea de Conte. Sin embargo, una notable Copa América (tercer clasificado) puede mejorar su situación en el equipo blanco.
“No acepta perder ni a la Play Station”
Cuando juega con su país, James marca un gol cada 3 partidos, lo que significa un promedio de 0,33 goles por encuentro, un registro que firmarían muchos delanteros. Cuando James juega con Colombia, además de ser insustituible, toma un papel protagonista y asume con gusto el liderazgo de ‘los cafeteros’. Su actuación en la Copa América Centenario, celebrada en Estados Unidos, fue clave para el conjunto ‘cafetero’. Suyo fue el estético a la par que increíble pase para Santiago Arias este que a su vez cedió a Carlos Bacca para lograr el tercer puesto en la Copa América.
Incluso tras el tercer puesto en EEUU, algunos medios de comunicación le recomiendan una salida del equipo blanco, opción que sería recomendable para jugadores con mentalidad pesimista. Pero el joven James sabe de su calidad y tiene ganas de reivindicarse, quiere ser el ‘10’ que necesita el equipo blanco y ofrecer las mismas prestaciones que con su selección.
James nunca se rinde y “no acepta perder ni a la PlayStation”, según dicen su madre y su hermana. Zidane tendrá muy complicado configurar un 11 titular si James responde como con su selección. No cesará en su empeño de triunfar como jugador blanco.