El juez del caso Neymar ha archivado la causa contra el presidente del FC Barcelona, Josep Maria Bartomeu, y contra su antecesor, Alexandre Rosell, tras el acuerdo de conformidad alcanzado por las partes. El acuerdo significa que se condenará al club catalán a pagar una multa de 5,5 millones de euros por fraude en el fichaje del jugador brasileño.

En un auto, el titular del Juzgado de Instrucción 22 de Barcelona, Juan Emilio Vilá Mayo, ha decretado la apertura del juicio oral contra el FC Barcelona por dos delitos contra la Hacienda Pública. Sin embargo, en la vista únicamente se deberá ratificar el acuerdo alcanzado entre los acusados, la Fiscalía y la Abogacía del Estado, que ejerce de acusación.

Esta vista se celebrará en la Audiencia de Barcelona -todavía sin fecha- y en ella el FC Barcelona reconocerá haber cometido un delito contra la Hacienda Pública en el ejercicio de 2011 y otro en el de 2013. El club ha aceptado pagar por estos delitos una multa de 1.440.000 euros por el primero y de 4.071.000 por el segundo, que se corresponde con el 60% de la cuota defraudada; el club ya consignó además 13.550.830 euros en el juzgado como responsabilidad civil por el fraude.

Este proceso judicial tuvo su origen en una querella que el socio del FC Barcelona Jordi Casas presentó en diciembre de 2013 por un presunto delito de apropiación indebida, que fue investigado por la Audiencia Nacional y tras el que la Fiscalía acusó al club de dos delitos contra la Hacienda Pública; luego la causa fue derivada a los juzgados de la capital catalana.

El caso se ha seguido al margen de la que causa se ha investigado en la Audiencia Nacional y que el juez José de la Mata decidió archivar la semana pasada, en la que se acusaba al delantero Neymar Da Silva y a su padre por corrupción en los negocios y estafa impropia en su fichaje por parte del FC Barcelona.

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