Aunque le pese, la llegada al banquillo de la Selección Española de Julen Lopetegui ha supuesto una auténtica revolución. El técnico quiso evitar precisamente esta palabra cuando fue presentado en julio, cuando prefirió hablar de "evolución" para definir el futuro de 'La Roja' tras relevar a Vicente Del Bosque. Sin embargo, la decena de cambios que ha realizado en su primera lista de convocados respecto al plantel que participó en la última Eurocopa hacen pensar más en una profunda renovación que en unos ligeros retoques.
Quizás, el cambio más radical es el del equipo que vertebra el combinado nacional, que hoy ha vuelto a ser el Real Madrid, con cinco jugadores. Hacía nada menos que una década que el Real Madrid no enviaba más jugadores que el Barcelona a la Selección. En aquella ocasión, Casillas, Salgado, Ramos y Raúl -en la que fue su última convocatoria con Luis Aragonés- superaron al trío del Barcelona, formado por Iniesta, Puyol y Xavi. Esta vez, el club azulgrana sólo lleva a Piqué, Jordi Alba, Sergi Roberto y Busquets, en contraste con el quinteto blanco: Ramos, Carvajal, Asensio, Morata y Lucas Vázquez.
El 6 de septiembre de 2006 España se medía a Irlanda del Norte en la fase clasificatoria para la Eurocopa de 2008. No era un partido más. Fue, de hecho, el segundo partido que jugaba la Selección tras el Mundial de Alemania, que terminó en una derrota que supuso el inicio de la época de mayor gloria en la historia futbolística de nuestro país. También significó el adiós de Raúl González Blanco, tras más de un centenar de apariciones con la camiseta nacional.
En la lista de convocados que había ofrecido la semana anterior Luis Aragonés figuraban cuatro jugadores del Real Madrid, tantos como del Atlético (Antonio López, Fernando Torres, Pablo y Pernía), mientras que con tres jugadores empataban Barcelona, Liverpool (Luis García, Reina y Xabi Alonso) y Valencia (Albelda, Marchena y Villa).
Hasta aquel momento, el Real Madrid llevaba más de dos décadas siendo el equipo que más jugadores aportaba a la Selección, exceptuando algunos períodos en los que el Barcelona más exitoso igualaba las cifras. Sucedió especialmente a principios de los 90, cuando Johann Cruyff estuvo a punto de igualar las cinco ligas consecutivas que el Real Madrid de la Quinta del Buitre cosechó a finales de los 80.
Sin embargo, las ligas del Depor (1999-00) y del Valencia (2001-02 y 2003-04), así como la extranjerización del Real Madrid de principios de siglo terminaron de moldear una Selección en la que los puestos se repartían entre muchos equipos. Fue el caso de aquella convocatoria de 2006 antes de medirse a Liechtenstein e Irlanda del Norte. Nadie aportó más de cuatro jugadores y un total de ocho clubes tuvieron representación en la lista.
Hasta que, precisamente a partir de 2006, el ciclo transformador del Barcelona terminó por calar en la Selección, en la que poco a poco fue aumentando la representación azulgrana. El récord absoluto se registró en 2013, cuando hasta nueve jugadores culés participaron simultáneamente en un mismo partido. Un ciclo que ha coincidido indudablemente con el de mayores éxitos internacionales de 'La Roja'. Hasta ahora.