Hace ya tres años que David Villa dejó el Atlético de Madrid en busca del sueño americano. El Guaje anunciaba su marcha a Nueva York en 2014 y ponía así fin a 13 años y 283 goles en España para embarcarse en una nueva aventura de la mano del entonces recién formado New York City FC, propiedad del Manchester City en la MLS estadounidense.
La salida de Villa a la MLS fue considerada por muchos como una pequeña retirada del reclamo futbolístico que hay Europa de cara a una liga menos competitiva como tiende a ser la MLS, siempre en progreso de crecimiento. Su efímero paso por el Melbourne City de la liga australiana (2 goles en 4 partidos) en lo que la franquicia de Nueva York se formaba, corroboraban esta teoría. Sin embargo, el ariete ha sido capaz de demostrar por qué llegó con tan alta expectación, y cómo todavía no ha perdido sus ganas de competir al máximo nivel.
Su llegada fue la de una estrella a un proyecto prometedor, y en el transcurso de su tercera temporada con la entidad de la Gran Manzana, el exdelantero del Valencia se ha alzado como un líder tanto dentro como fuera del vestuario, a la vez que no ha dejado nunca de lado su idilio con el gol. Tanto es así, que actualmente Villa es uno de los jugadores con mejor promedio de goles en liga (49 en 76 partidos), a la vez que ejerce de mentor y referente para sus compañeros en el inquilino más reciente del mítico Yankee Stadium del Bronx.
INICIO COMPLICADO
Atrás quedaban para Villa el Sporting, el Zaragoza, el Valencia, el Barcelona y el Atlético de Madrid. El delantero empezó como la piedra angular del diseño, y pese a la expectación que trajo la primera temporada (2015) de un equipo nuevo encabezado por los fichajes de Frank Lampard y el propio Villa, el NYC FC no cumplía las expectativas. Ni siquiera la llegada de Andrea Pirlo y Andoni Iraola a mitad de curso terminaban de relanzar el proyecto, por lo que el NYC FC ponía punto final a la temporada como octavo en su conferencia y decimoséptimo dentro de la MLS.
Villa y los suyos despedían así el curso antes de lo esperado. Sin llegar a los playoffs, el equipo decía adiós a su temporada inaugural con algún detalle de calidad para los nuevos aficionados de Nueva York, 18 goles del Guaje, y esperando un segundo curso con algo más de interés, cosa que esperaban conseguir con la llegada de Patrick Vieira al banquillo de Nueva York y la destitución de Jason Kreis como primer entrenador del conjunto celeste.
BOTA DE PLATA, MVP Y PLAYOFFS
Dicho y hecho, la llegada de Patrick Vieira dio otro aire al equipo en su segundo año compitiendo en la MLS (2016). Con un mediocampo formado por botas como las de Lampard, Pirlo y Diskreud, Villa siguió a lo suyo y cerró el año anotando 23 goles que le valieron una Bota de Plata por detrás de Bradley Wright Phillips (NY Red Bulls) y sus 24 goles, y tras una buena temporada del combinado neoyorkino, el diseño de la plantilla retomó ese afán ganador con el que habían entrado en la expansión de la MLS un año atrás.
A esa Bota de Plata cabe añadir el premio Landon Donovan que ganó el de Langreo al jugador más valioso de la liga del soccer esa misma temporada, y que supuso la primera vez que un jugador español se llevaba el galardón. Además, las actuaciones y los goles de Villa llevaron al NYC FC hasta los primero playoffs de la Audi MLS Cup de su historia, que pese a caer ante Toronto en segunda ronda, demostró una vez más que el Guaje ha cruzado el charco para luchar y golear.
AMPLIACIÓN POR UNA TEMPORADA MÁS Y GOL 50
Como premio a esas ganas de luchar y golear, el hashtag #FromDayOne (desde el primer día) anunciaba al comienzo de la presente temporada en las redes sociales del NYC FC la renovación de Villa, su capitán y máximo goleador, hasta el término de la temporada 2018.
Dicha renovación supuso una muestra más de la confianza depositada por parte del club en el delantero y la idea de continuar con el proyecto NYC FC a largo plazo en la MLS para llegar hasta la cima del balompié yanqui.
"Cuando miro hacia atrás a esos primeros días en 2014, es realmente asombroso ver hasta dónde hemos llegado en tan poco tiempo, y saber que hay tantísimo potencial para que podamos seguir creciendo dentro y fuera del campo”, declaraba el Guaje en rueda de prensa. “Hace tres años empezamos un proyecto muy bueno para construir este fantástico club, y que me eligieran como capitán es un orgullo que todavía llevo conmigo”.
Muestra de ese orgullo es el comienzo de temporada que está teniendo Villa en su tercer año. Con 8 goles en 13 partidos, el Guaje busca ahora su gol 50 en América, una marca más que le permita seguir haciendo historia en una liga que ya le empieza a coger cariño, y en la que tiene pensado seguir al menos hasta que acabe su contrato con 37 años.
Dentro de una franquicia donde destacan campeones de Europa y del mundo, Villa se encuentra este año otra vez ante el reto de llevar a su equipo a ganar la que puede ser su primera Supporters Shield (lo que en España sería el equivalente a la Liga Santander) y su primera Copa Audi (similar a la Copa del Rey, pero con un formato más parecido al de la SuperBowl). Así, Villa se sigue marcando objetivos para agrandar su dilatada trayectoria, y a la vez recordar a sus seguidores que no ha dejado de ser aquel chaval que hacía los goles fáciles jugando con los mayores en el Sporting de Gijón.
“SI LOPETEGUI ME LLAMA IRÉ A LA SELECCIÓN”
Como si de una joven promesa se tratara, al finalizar la temporada pasada Villa apuntaba incluso la posibilidad de volver a vestir la camiseta de la selección nacional dirigida hoy por Julen Lopetegui. "El nivel de los delanteros españoles es muy bueno: Diego Costa, Morata, Alcácer, Lucas Vázquez, Lucas Pérez, Aduriz... Hay muy buenos jugadores y eso es bueno para España. Lopetegui estará contento de tener tantos jugadores, pero estoy preparado. Si él quiere, iré", explicaba el delantero asturiano en una entrevista a The Planet Footbal.
"Villa sigue en activo y a muy buen nivel. En un futuro ya veremos si puede volver. Siempre tenemos en mente a muchos jugadores seleccionables y no cerramos ninguna puerta", respondía el seleccionador, dejando un ápice de ilusión para los seguidores del Guaje, y dando validez al argumento de que David Villa no se ha hecho mayor desde que decidiera recalar en las filas del conjunto más rompedor de la MLS.