Tras sus problemas con Hacienda, Jorge Mendes ha decidido cesar a los testaferros profesionales que controlaban su principal empresa, Gestifute, con sede en Irlanda. La decisión se tomó el pasado 18 de abril, 10 días después de que la Fiscalía española presentara una denuncia contra Radamel Falcao, uno de los jugadores representados por Mendes, y le acusara de defraudar presuntamente 5,6 millones de euros desde sociedades en Islas Vírgenes y Panamá. Pero el cambio no fue comunicado al registro mercantil de Dublín hasta dos meses después, el pasado 17 de julio.
La documentación oficial presentada ante la Administración irlandesa refleja el cese como secretario y director en Gestifute de una sociedad llamada Gransec Limited, una firma controlada desde el Edificio Ulisysses de la calle Foley de Berlín y que, según publicó El Confidencial, participaba también en los negocios de la red de sociedades empleada por Cristiano Ronaldo para canalizar sus ingresos.
Con esta decisión, Jorge Mendes rompe la relación de su principal empresa con los testaferros profesionales (mariachis, como se les conoce en el sector financiero) que participaron en la red de negocios de Cristiano Ronaldo. Algo que concuerda con sus declaraciones judiciales, en las que ha mantenido siempre su nula participación en la planificación de la estrategia fiscal de sus representados.
Sin embargo, las conexiones entre la empresa de Mendes y las que ahora investiga Hacienda de sus representados siguen vigentes. Primero porque Gestifute sigue dirigida -aunque de forma mancomunada- por un abogado local llamado Andy Quinn. El mismo especialista que figura en la sociedad irlandesa MIM, que gestionaba los derechos de imagen, entre otros, del delantero Cristiano Ronaldo. Y segundo porque la sociedad fiduciaria que ha dejado la sociedad, ha otorgado su cargo a Luis Correia, sobrino de Mendes y mano derecha del representante de jugadores.
Luis Correia, investigado
El pasado 27 de junio, la jueza que investiga las finanzas presuntamente detraídas por Radamel Falcao al fisco tomó declaración a Mendes. Al término, la magistrada anunció que citaría como investigado a Luis Correia, pero no por su relación con Gestifute, sino por ser el responsable de otra sociedad irlandesa. Una empresa llamada Polaris y en la que terminaban tras pasar por varios paraísos fiscales los fondos obtenidos por la explotación de los derechos de imagen de varios jugadores.
En total, siete de sus representados han tenido, de una forma u otra, problemas con Hacienda. A nombres como el de Carvalho o Pepe le siguieron Di María, Coentrao, Falcao y el entrenador José Mourinho. En todos los procedimientos, Hacienda ha investigado las finanzas de los deportistas desde 2011, último año todavía no prescrito cuando arrancaron las pesquisas. Pero las paralelas de Hacienda se han saldado de distinta manera. Mientras algunos han preferido pagar y evitar el litigio en los juzgados, Falcao y Cristiano Ronaldo se han visto investigados por presuntos delitos de fraude fiscal.