Ángel María Villar, presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) suspendido temporalmente durante un año, acudió este miércoles al encuentro navideño de ese organismo celebrado en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas.

La presencia de Villar en las instalaciones de la RFEF se produjo después de la última reunión de la junta directiva, que acordó convocar elecciones parciales el 29 de enero para elegir las plazas vacantes en la Asamblea General y posponer sin fecha la votación de la moción de censura promovida por Luis Rubiales, prevista para el día 16 de ese mes.

Rubiales, que ha presidido la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) durante los últimos siete años hasta que el pasado 20 de noviembre renunció para promover la moción de censura, fue otro de los asistentes al encuentro, celebrado un día después de que presentara oficialmente su candidatura a la presidencia de la RFEF.

Hace dos días Villar aseguró que él sigue siendo el presidente de la RFEF, aunque Juan Luis Larrea, anterior tesorero, es el que ejerce las funciones por la suspensión que la Comisión Directiva del CSD le impuso el 25 de julio ante la instrucción de la Operación Soule por la Audiencia Nacional.

El pasado lunes, en su primera comparecencia pública, Villar aseguró que presentará todos los recursos posibles para evitar que sea la administración la que decida que cese como presidente de la RFEF, cargo que ostenta desde 1988 y para el que fue reelegido el pasado 22 de mayo.

La de este miércoles no es la primera visita que Villar hace a las instalaciones de la RFEF después de ser suspendido, ya que en varias ocasiones acudió a la misma, una de las más recientes para asistir a un congreso internacional de derecho del fútbol el mes pasado.

"Sin asomo de sospecha ganamos plaza en el Mundial"

Juan Luis Larrea, presidente en funciones, dio por hecha la presencia de la selección española en el Mundial de Rusia pese a que la FIFA está preocupada por posibles injerencias del Gobierno en ese organismo, y aseguró que, "sin asomo de sospecha", se ha ganado su plaza.

La normativa de la FIFA establece que las federaciones nacionales deben gestionarse sin injerencias de terceros. El incumplimiento de esa norma podría incluso excluir a España del Mundial.

"Despedimos un año del que con la cabeza muy alta podemos decir que nos ha aportado un magnífico balance. Uno de nuestros primeros objetivos, el primero por su trascendencia deportiva y social, la clasificación para el próximo Mundial de Rusia, lo alcanzamos sin una sola mancha en el camino", expuso en su discurso Larrea ante los invitados al almuerzo navideño de la RFEF.

"España obtuvo su clasificación de forma impecable, clara y contundente. Sin asomo de sospecha nos ganamos plaza en el Mundial, al que acudiremos con la confianza que nos permiten dos aspectos esenciales: la calidad y las ganas de nuestros futbolistas", añadió. Larrea destacó la seguridad de la selección española en el camino a su objetivo, en el que relegó a la repesca a Italia, que luego fue eliminada.

"Obtuvimos ese derecho con más desahogo del inicialmente previsto y, además, invictos en la fase. Esa condición también se alargó en los encuentros amistosos que disputamos este año, cuatro, de los que ganamos dos, frente a Francia y Costa Rica, y empatamos los otros dos, ante Colombia y Rusia. Un balance, diría yo, que muy difícil de igualar. Excelente", señaló.

El actual presidente por la suspensión de Ángel María Villar destacó el subcampeonato de Europa de la selección española sub'21 y el título mundial de la sub'17, así como en el título continental femenino de la sub'19 y el segundo puesto de la sub'17. "Nada de esto se habría podido conseguir sin el apoyo absoluto de las federaciones de ámbito autonómico, en las que el fútbol español tiene su origen. Las federaciones de ámbito autonómico constituyen el eje sobre el que gira todo lo demás", afirmó.

Larrea también quiso agradecer a "quienes durante todo el año han colaborado lealmente con la RFEF, en tiempos muy delicados". Y terminó haciendo "mención especial de admiración y respeto" hacia los "árbitros, por lo general, no muy bien tratados", y plasmando su "admiración" por el expresidente José Luis Pérez Payá y los exseleccionadores José Emilio Santamaría, Vicente Miera, Vicente del Bosque y José Antonio Grande.

"Echamos el telón a un año convulso y complicado, el que más en la historia reciente de la RFEF. Pero ha sido, también, un año en el que su funcionamiento ni se ha detenido ni se ha visto resquebrajado. Ahí están los números que reflejan la actividad de esta casa y los éxitos que corroboran, repito, una gestión que, más allá de esas dificultades, no se ha visto frenada", destacó.

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