Los locos métodos de entrenamiento de Bielsa: recoger basura durante tres horas

Si existe un entrenador extravagante, ese es Marcelo Bielsa. El técnico argentino, de 63 años, firmó este verano con el Leeds United, siendo el conjunto inglés el duodécimo equipo que entrenará tras Newell's Old Boys, Atlas, América, Vélez Sarsfield, Espanyol, Athletic, Olympique de Marsella, Lazio (abandonó el cargo a los pocos días) y Lille, además de las selecciones de Argentina y Chile.

El rosarino es conocido como 'el Loco', y es por algo. Sus equipos suelen practicar un fútbol vistoso, de ese que enamora a los más románticos de este deporte. Sin embargo, alcanzar tal juego conlleva una serie de métodos y prácticas que rozan (y en muchas ocasiones sobrepasan) la extravagancia. El último ejemplo de esto ha sido la información revelada por el diario inglés The Guardian.

Según dicha publicación, Bielsa ha tenido a sus jugadores, la actual plantilla del Leeds United, recogiendo basura en los aledaños del estadio durante tres horas. Al parecer, el sudamericano quería demostrar a sus hombres cuánto debe trabajar una persona de clase humilde para poder pagar una entrada y verles jugar. De esta forma, ha concienciado a sus chicos, y es que el propio medio revela una curiosa estadística: con Bielsa al mando, los jugadores del Leeds United han corrido más en los seis partidos de pretemporada disputados hasta ahora que en todo el promedio de la anterior campaña.

A por el ascenso

El Leeds United finalizó la temporada 2017/2018 en el 13º lugar de la Championship, la segunda categoría del fútbol inglés, con sesenta puntos (17 victorias, nueve empates y veinte derrotas). Con el fichaje de Bielsa, los dirigentes del club quieren dar un golpe de efecto que les devuelva a la Premier League, competición que han ganado en tres ocasiones y que no pisan desde la temporada 2003/2004.

Para esta tarea, se han reforzado con el delantero inglés Patrick Bamford (procedente del Middlesbrough por 7,5 millones de euros) y el lateral escocés Barry Douglas (del Wolverhampton por 3,4 millones), además de las cesiones de Lewis Baker, Jamal Blackman y Jack Harrison. Aunque todo parece indicar que su mejor incorporación está en el banquillo.