Saúl Ñiguez ha sido protagonista en la revista francesa So Foot, que ha dedicado al ilicitano un reportaje del que se ha conocido un adelanto, en el que el centrocampista y su padre hablan de uno de los momentos más difíciles de su carrera, el golpe en el riñón que recibió en Leverkusen.
Fue el 25 de febrero de 2015, en el partido de ida de octavos de final de la Champions. El Atlético de Madrid había sido campeón de su grupo, superando a la Juventus -que después sería finalista- y en el sorteo su rival había sido el Bayer Leverkusen. Con el resultado de 0-0, a los 42 minutos, en la disputa de un balón aéreo, el central griego Kyriakos Papadopoulos arrollaba a Saúl Ñíguez, que recibió un duro golpe en su riñón en el impacto.
Al ver que no podía continuar, fue sustituido por Raúl García, y ahí empezó su calvario. Camino al vestuario se mareó, llegando a vomitar hasta siete veces antes de conseguir llegar. El susto más grande llegó cuando, ya en el vestuario, empezó a sufrir convulsiones. Entonces el equipo médico del Atlético de Madrid decidió ya que el jugador debía ser inmediatamente trasladado al hospital.
'Mono' Burgos evitó que se extirpase el riñón
Jose Antonio Ñíguez, más conocido como 'Boria', padre de Saúl, recuerda ese momento en la revista francesa: "En la ambulancia que nos llevó al hospital, me dijo que ya no sentía sus extremidades, estaba llorando ... Nunca lo había visto así, me dijo que estaba preparado para que le quitasen el riñón". En sus palabras, fue Germán 'el Mono' Burgos, que pasó por un cáncer de riñón en el año 2003, quien convenció a Saúl de que no lo hiciera: "No te quites el riñón porque después del fútbol te queda una vida entera por delante".
Saúl estuvo cuatro días en el hospital, acompañado por su padre y por el jefe de los servicios médicos del Atlético de Madrid, el doctor Villalón. Pudo salir cuando se drenó su riñón, y de esa experiencia el futbolista se tatuó en la muñeca la frase "La fuerza no proviene de la capacidad corporal sino de la voluntad del alma". Su vuelta fue el 4 de abril en El Arcángel, frente al Córdoba, donde además marcó.
El propio Saúl reconoce en el reportaje que puso su salud en riesgo cuando volvió: "Sangraba después de cada entrenamiento y de cada partido. Tuve que poner mi propia salud en juego para defender los colores del Atlético". Un episodio que ha quedado atrás, pero del que el futbolista aprendió mucho.
Noticias relacionadas
- Se filtra la camiseta del Atlético de Madrid para la temporada 2019/2020
- La última revolución de Luis Enrique en la Selección: del cambio de sistema a un solo culé
- El paseo de los horrores del Wanda: la placa de Torres tan maltratada como la de Courtois
- Griezmann, con un doblete, da la victoria al Atlético de Madrid ante el Brujas
- Hinchas del Atleti destrozan la placa de Courtois en el Wanda Metropolitano
- Las mejores imágenes del Atlético de Madrid-Brujas