Varios medios recogían este viernes 2 de noviembre que la UEFA había ayudado al París Saint-Germain y al Manchester City a encubrir su 'dopaje financiero'. Al parecer el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, habría ayudado de manera sistemática a la entidad gala y al cuadro inglés para que ambos clubes no fueran sancionados por incumplir el Fair Play Financiero.

Las informaciones publicadas señalaban que el conjunto francés habría sido destinatario de 1.800 millones de euros procedentes del gobierno de Qatar de forma irregular, equipo que sería expulsado de la Champions League, de ser cierto lo publicado.

Además, junto a Infantino aparecían implicados otros dos nombres. Michel Platini por los "acuerdos secretos" que sirvieron para pasar por alto unos hinchados contratos de patrocinio - los cuales fueron objeto de sospecha para la UEFA- y permitir donaciones ilícitas. Y el expresidente de Francia, Nicolas Sarkozy, quien habría ocupado un papel directo en la trama. Respecto al conjunto británico, no hay cantidades concretas  divulgadas.

El comunicado

Paris Saint-Germain siempre ha actuado en cumplimiento absoluto de las leyes y regulaciones emitidas por las instituciones deportivas.

El club siempre ha cumplido estrictamente con las leyes y regulaciones vigentes y niega las acusaciones publicadas hoy por Mediapart.

La cantidad del contrato de QTA ha sido conocida por la UEFA y el público en general desde 2014.

En 2014, la UEFA confirmó que nuestro contrato con la Junta de Turismo de Qatar difunde y promueve al país.

El principio de este contrato es simple: hoy los resultados positivos del PSG se asocian sistemáticamente con Qatar y benefician directamente a su imagen.

Desde el establecimiento del Fairplay financiero, Paris Saint-Germain ha sido uno de los clubes más auditados y controlados de la historia.

Además de sus propios auditores, KPMG y PWC, el club ha alojado en su sede varios auditores encomendados por las autoridades de fútbol. Durante los últimos siete años, siempre se han beneficiado de información completa sobre las cuentas y los contratos del club.

Los intercambios con los miembros de las Cámaras del Control Financiero de Clubes (ICFC) se realizan dentro del marco provisto por los estatutos de la UEFA. Sobre esta base, la UEFA decide independientemente. La severidad de las decisiones tomadas sobre París Saint-Germain lo demuestra.

Paris Saint-Germain entiende y está de acuerdo con el deseo de limpiar la deuda del fútbol europeo y pide una regulación justa que permita el juego limpio y facilite la inversión sostenible en el fútbol.

Francia está a la vanguardia en estos temas. Desde 1984, la Junta Nacional de Control de Gestión (DNCG) ha establecido reglas y obligaciones estrictas que van más allá de las de la UEFA y ha demostrado su eficacia en la gestión de la gestión de los clubes.

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