La resaca de los lamentables episodios de la final de la Libertadores todavía dura. A falta de conocerse la fecha y el lugar definitivo del encuentro entre River y Boca los episodios en torno a la barbarie que se vivió en las inmediaciones del Monumental sigue avergonzando al mundo del fútbol, incluso a los propios aficionados de River Plate. Es el caso de Gabriel Hugo Lanza, que ha criticado duramente a los radicales de su propio equipo a través de una dura carta.

"Yo, me rindo. No doy más. No puedo más. Este país es una mierda. Estos políticos son una mierda. El fanatismo es una mierda", escribió el seguidor 'millonario', que reconoció que la violencia ha conseguido ganar al fútbol y que no piensa acudir más a un campo de fútbol

"Señores, nos ganaron los violentos. El fútbol me pudrió. Y lo digo con todo el dolor del alma. Hoy fue el último día que fui a la cancha. Me cansé. Me cansaron. Me harté", condenó el seguidor de River.

También criticó los duros cacheos a los que se tuvo que enfrentar y la total impunidad de otros seguidores: "¿Hasta cuando debo soportar cacheos vejatorios y que me saquen un encendedor o una lima de uñas mientras otros pasan marihuana, cocaína, bengalas o armas blancas? ¿Hasta cuando debo soportar tres retenes donde me apretan a mi y a mis hijos y me tratan como delincuente?", denunció en su carta.

Los barras bravas de River Plate acabaron con la ilusión de Gabriel Hugo, que no soportó ver a su hijo llorar aquel día, y aseguró estar muerto tras los lamentables episodios que presenció: "Me mataron. Y un muerto no concurre más a un estadio, ni paga más una cuota social. No solo decido no ir nunca más a una cancha en este país de cuarta gobernado por ineptos, corruptos y violentos. Hicieron llorar a mis hijos, y eso no se perdona. Métanse la Copa Libertadores en el orto", sentenció el seguidor argentino.

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