París se convertía en la capital del fútbol este lunes 3 de diciembre. Algunas de las personalidades más importantes en el mundo del balompié se daban cita en el emblemático Le Grand Palais de la Ciudad de la Luz. En una noche en la que Luka Modric se coronaba como el mejor futbolista del mundo, acabando así con la hegemonía de Cristiano Ronaldo y Lionel Messi, el fútbol femenino daba un gran paso adelante al hacerse entrega, junto trofeo dorado masculino y el Trofeo Kopa, el primer Balón de Oro femenino de la historia.
En una gala en la que la música, el baile, las luces y el humo quitaron parte de protagonismo al deporte rey, Ada Hegerberg se convertía en la primera ganadora del preciado trofeo, imponiéndose en las votaciones a jugadores de la talla de la brasileña Marta, la australiana Sam Kerr, la danesa Pernille Harder o la holandesa, jugadora del Barcelona, Lieke Martens. La vencedora, la delantera noruega, consiguió así reinar en París junto al centrocampista del Real Madrid y Kylian Mbappé, quien fue proclamado como el mejor jugador menor de 21 años, llevándose el Kopa además de quedar cuarto en las votaciones del Balón de Oro masculino.
A lo largo de la historia se venía premiando a los mejores futbolistas, pero siempre en categoría masculino. Este 2018, con el feminismo en plena lucha por conseguir la igualdad y acabar así con la brecha que existe, France Football decidía aportar su granito de arena para que las desigualdades comiencen a desaparecer, también, en el mundo del fútbol. Sin embargo, algo ocurrido durante la gala manchó la celebración y abrió el debate en una noche que tenía que haber sido todo lo contrario: una fiesta del fútbol femenino y masculino, una unión con vistas al futuro.
El gesto machista que evidencia el camino por recorrer
Todavía queda un largo trecho para acabar con esa famosa y ya comentada brecha. Una brecha que parece a día de hoy insalvable, aunque se vayan consiguiendo pequeños éxitos como este de Ada Hegerberg. Los hombres cobran más, tienen mayor repercusión y mejores contratos publicitarios, pero eso no es motivo para acabar con la lucha por hacerse un hueco importante. Lo que no es de recibo y debería desaparecer de inmediato son gestos o comentarios como los de Martin Solveig, DJ en la gala del Balón de Oro.
Tras recoger el trofeo, cada galardonado bajaba por las escaleras y se encontraba allí con el DJ francés. La delantera noruega se encontró así por primera vez cara a cara con Martin Solveig, quien lo primero que le preguntó tras hacer historia fue: "¿Sabes bailar twerking?". La respuesta de la futbolista del Olympique de Lyon -equipo que había colocado a siete de sus jugadores entre las quince finalistas al Balón de Oro- contestó con un rotundo "no" y con cara de pocos amigos.
Una ofensa, sobre todo, porque minutos antes no había hecho una pregunta similar a Mbappé. Tras esto, ambos bailaron una canción de Frank Sinatra. El delantero del PSG, y campeón del mundo con Francia, también había bailado junto a Martin Solveig tras tener entre sus manos el Trofeo Kopa, pero la cara de Kylian Mbappé fue también un poema después de escuchar el comentario del DJ hacia su compañera de profesión. Una polémica que no ha tardado en estallar en las redes sociales, donde personajes tan relevantes como el tenista Andy Murray han criticado el comentario machista.
"Otro ejemplo del ridículo sexismo que aún existe en el deporte. ¿Porqué las mujeres aún tienen que aguantar esta mierda? ¿Qué le preguntaron a Mbappé y Modric? Me imagino que algo relacionado con el fútbol. Y para toda la gente que piense que estamos exagerando y que piense que fue una broma... No lo fue. He estado metido en el deporte toda mi vida y el nivel de sexismo es irreal", denunciaba el escocés y exnúmero uno de la ATP.
Un largo trayecto hacia la igualdad
Ada Hegerberg señalaba al recoger el Balón de Oro que este premio era "un paso importante para el fútbol femenino, y juntos vamos a conseguir más". Las pioneras, aquellas que pusieron la primera piedra, fueron un grupo de mujeres inglesas que comenzaron un movimiento arriesgado dejando a un lado los deportes que se conseguían correctos y decorosos para quitarse el corsé y enfundarse 'las botas'.
Fue a finales del siglo XIX en Inglaterra cuando estas mujeres lucharon por poder jugar a un deporte que las apasionaba. Un primer paso del movimiento feminista. El origen de todo. Las burlas, los comentarios despectivos no hicieron que estas valientes jugadoras acabaran con su sueño. Ahora las niñas tienen más facilidades que aquellas inglesas, aunque todavía están a años luz de ganar lo que ganan los hombres o de poder vivir de su pasión, de este único trabajo sin miramientos o recelos por el que pasará.
Las futbolistas, como regla general, aún no pueden vivir única y exclusivamente del fútbol. Se siguen poniendo trabas con cláusulas como la de antiembarazos y solo si consigues un gran éxito como las categorías inferiores de la Selección se gana un minuto efímero de protagonismo. El camino por recorrer es largo, pero la ilusión por alcanzar los sueños de todas estas luchadoras mujeres lo puede todo.
Las nuevas generaciones vienen pisando fuerte y queriendo romper todos los estereotipos, todos los moldes. La pasada semana, la selección española sub17 femenina se proclamó campeona del mundo y, además, con una entrenadora a los mandos, Toña Is. La subcampeona, México, también es dirigida por una mujer. Un síntoma más de que algo está cambiando, aunque el proceso no sea tan rápido como el deseado. Por el momento, en España el fútbol femenino tiene cada vez más aceptación y los éxitos de estas jóvenes futbolistas son aplaudidos por todo el país.
Comenzar a ver a todo jugador o jugadora como un igual. Mejorar las plataformas para seguir el fútbol femenino, ya que la Liga Iberdrola es una potencia en el Viejo Continente. Más reconocimiento público y seguimiento continuo no puntual por un gran logro o evento... Todavía queda mucho por hacer, pero la lucha continúa pese a cualquier revés que se haya presentado antes o que se presente en el futuro.
[Más información: Toña Is, entrenadora de España Sub17: "Cualquier punto de relajación nos iba a echar para casa"]
Noticias relacionadas
- Martin Solveig, el DJ del Balón de Oro, se disculpa con Ada Hegerberg por su comentario machista
- Kylian Mbappé gana el Trofeo Kopa, el Balón de Oro de los sub21
- Lenglet: "Modric merece el Balón de Oro"
- Carvajal sobre Modric: "Es un Balón de Oro más que merecido"
- La venganza de Modric y el Madrid: de "fichaje de medio pelo" al Balón de Oro
- Modric, ganador del Balón de Oro 2018