La Federación de Fútbol de Río de Janeiro canceló el partido que este sábado debían jugar el Flamengo y el Fluminense por la Copa Guanabara, tras un incendio que causó diez muertes en la sede del primero de esos clubes.
"La Federación de Fútbol del Estado de Río de Janeiro lamenta la tragedia ocurrida en el Centro de Entrenamientos del Flamengo y se solidariza con las familias", dice una nota divulgada este viernes, que agrega que "no hay clima para la realización del Fla-Flu este sábado", en el estadio Maracaná.
El gobernador de Río de Janeiro, Wilson Witzel, decretó tres días de luto oficial por las víctimas de este incendio, que ocurre dos años y dos meses después del accidente aéreo ocurrido en Colombia que acabó con la vida de casi toda la plantilla del modesto Chapecoense.
Río de Janeiro se recupera aún del fuerte temporal de lluvia y viento que arreció sobre la capital fluminense la noche del miércoles y que dejó seis muertos, inundaciones, deslizamientos de tierra, la caída de unos 170 árboles y decenas de vehículos destrozados.
La zona oeste, donde se encuentra el centro de entrenamiento del Flamengo, fue una de las más afectadas por esa tempestad.
El Ninho do Urubu, la sede del Flamengo
El Ninho do Urubu, considerado como uno de los centros de entrenamiento más modernos de Latinoamérica, cuenta con un módulo para el equipo profesional del Flamengo, dos campos y un espacio específico para la preparación de porteros, además de una zona para alojamientos.
En 2018, el Flamengo, que es el equipo de fútbol más popular de Brasil y una potencia de jóvenes promesas en el país, inauguró una nueva estructura para la primera plantilla y dejó las instalaciones antiguas para los jugadores de las categorías base del club.
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