Este martes 13 de agosto será un día muy difícil de olvidar para Iker Casillas. Su Oporto se jugaba clasificarse para la edición 2019/2020 de la Champions League, y enfrente tenía al Krasnodar ruso. El veterano portero español no se ha vestido de corto ni en la ida ni en la vuelta, pero sí ha visto como, contra todo pronóstico, su club ha naufragado ante su afición cuando lo tenía todo a favor.
En el partido de ida disputado en Rusia, el Oporto consiguió llevarse la victoria por la mínima (0-1) sobre la bocina. Todo hacía pensar que, contando que jugaban la vuelta en casa, tenía que presentarse un escenario catastrófico para quedar eliminados. Inesperadamente así ha sido y el Krasnodar ha salido con la mentalidad de asaltar el Estadio Do Dragao desde el primer minuto.
El asedio del equipo visitante contra la portería rival vio recompensado su esfuerzo con tres goles en apenas 35 minutos. El drama se mascaba entre la hinchada local, pues no se podían creer lo que estaba sucediendo. El Oporto trató de responder en la segunda parte y, en el minuto 57, Ze Luis dio algo de esperanza a los suyos. En el minuto 77, Luis Díaz anotó el segundo, pero ya no quedaban fuerzas ni tiempo para completar la gesta.
El final de una era
De esta forma, el marcador reflejaba un 2-3 que suponía el fin de andadura del Oporto en la Champions League y, al mismo tiempo, el final de una era para Iker Casillas en lo que se refiere a participaciones en la competición. El curso pasado, el exportero del Real Madrid encadenaba su vigésima temporada consecutiva en la élite de Europa.
De haberse cumplido los pronósticos, este año habría sido su vigésimoprimera actuación, pero el Krasnodar se ha encargado de impedirlo y su récord quedará grabado en la historia a la espera de que alguien la pueda superar en el futuro.
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