El Comité de Apelación de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) estimó la solicitud presentada por el Rayo Vallecano y, en consecuencia, suspendió "cautelarmente la ejecución de las sanciones" impuestas al club franjirrojo por las pancartas exhibidas y los cánticos proferidos por un sector de su afición contra el jugador del Albacete Roman Zozulia y que motivaron el pasado 15 de diciembre la suspensión del encuentro en el descanso.
El Comité de Competición de la RFEF impuso el 27 de diciembre una sanción económica de 18.000 euros y la clausura parcial del Estadio de Vallecas por un periodo de dos partidos y decidió que el encuentro se reanudase a puerta cerrada.
De esta forma, en los dos próximos partidos que dispute el conjunto franjirrojo como local podrá tener su estadio abierto completamente sin ver como el único fondo del estadio estaría vacío. Lo mismo sucede con la segunda parte del encuentro que, a falta de que se establezca la fecha del partido, se podría jugar con público.
El Rayo Vallecano interpuso el pasado 2 de enero un recurso de apelación, en el que subrayó que la entidad "fue diligente en la prevención de los hechos que finalmente se produjeron en el estadio" y, por lo tanto, "las sanciones no son ajustadas a Derecho".
Ampliación del recurso
Asimismo, comunicó que ampliaría su recurso, para fundamentar su defensa "a fondo", dentro del plazo de diez días hábiles que concluye el 14 de enero.
Por esto último, el Rayo Vallecano solicitó la suspensión cautelar de las sanciones impuestas. La misma fue estimada este viernes por el Comité de Apelación de la RFEF, que preside Miguel Díaz y García-Conlledo.
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