La Copa del Rey siempre ha sido el 'torneo de todos'. Una competición que hermanaba pueblos, ciudades y regiones. Que mezclaba equipos de categoría Champions con humildes. Una oportunidad para que muchos clubes se forjaran un nombre a nivel nacional en España.
Esta temporada se ha avanzado en el atractivo de la competición al terminar con las eliminatorias a doble partido. Al menos así es hasta semifinales. El nuevo formato impulsado por Luis Rubiales y la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) da pie a muchas más sorpresas sobre el césped.
Así se ha visto desde que empezó la Copa este curso. Equipos de Segunda División B como Cultural Leonesa o Mirandés han protagonizado gestas como las de apear a Atlético de Madrid y Sevilla, respectivamente, en la ronda de octavos de final. De la misma forma que el Granada abrió la ronda de cuartos echando al Valencia de la competición.
Al éxito del conjunto nazarí se suma otro más del Mirandés, ya que también ha conseguido el billete para las semifinales de la Copa del Rey tras volver a aferrarse a Anduva y apear de la competición al Villarreal. Ahora los burgaleses sueñan con hacer historia en un torneo con el que mantiene un vínculo especial.
Estas sorpresas, aunque parezcan inusuales, también se veían en antaño. Muchos son los equipos humildes con pocos recursos que han sido un auténtico dolor de cabeza para los colosos del fútbol español. Incluso algunos consiguieron alcanzar el sueño de jugar la final de la Copa del Rey.
Alavés y Mirandés, reyes de la década
En los últimos años encontramos al Alavés en lo más alto del ránking de grandes gestas coperas. Los vascos alcanzaron la final de la Copa del Rey en 2017 ante el Barcelona y tuvieron la oportunidad de pugnar por el título. A su favor contaron con que tuvieron un camino 'asequible' en las rondas previas, quedando emparejados contra conjuntos como Deportivo (octavos), Alcorcón (cuartos) y Celta de Vigo (semifinales).
Mayor mérito tuvo en 2012 la gesta del Mirandés, que se plantó en las semifinales del torneo siendo un equipo de Segunda B. Por el camino apeó a equipos como un Villarreal de Champions o un histórico como el Espanyol. El Athletic fue el único obstáculo que les separó de la gran final.
Los fantasmas del Real Madrid
Pero en la primera década de este siglo también se encuentran noches mágicas del torneo. La más recordada: el icónico 'Alcorconazo' que expulsó al Real Madrid en 2009. Una temporada en la que Manuel Pellegrini estrenaba un proyecto galáctico, con estrellas como Cristiano Ronaldo, Kaká o Benzema recién fichadas el verano anterior.
Los blancos ganaron al Alcorcón 1-0 en la ida en el Santiago Bernabéu, pero la sorpresa llegó con un 4-0 para los de Anquela en la vuelta de octavos de final. Una eliminación que rememoraba fantasmas del pasado, ya que el año anterior los blancos quedaron apeados del torneo en dieciseisavos por un Real Irún (3-2 y 3-4).
Hacia ocho años que no se veían varapalos así en Concha Espina, ya que la última vez había sido en diciembre del año 2000. Un equipo liderado por Vicente del Bosque, que meses antes había conseguido la Champions ante el Valencia en París, se vio superado en dieciseisavos por un Toledo que militaba en Segunda B.
Ecatombes rojiblancas
Pero el Real Madrid no ha sido el único equipo en llevarse sorpresas en la Copa del Rey. El Atlético lo vivió en 2011 contra el Albacete al caer en la ronda de dieciseisavos, aunque aquello significó la salida de Gregorio Manzano y la llegada de Simeone. Un movimiento con el que los rojiblancos cambiaron su historia.
De la misma manera el Athletic se vio superado de forma sonrojante por un colista de Segunda División B como el Gimnástica de Torrelavega en 2003. Los leones cayeron en su torneo fetiche en treintaidosavos, justo en un momento de su historia en el que todavía eran el club con más títulos de Copa.
Las sombras del Barça
De estas curas de humildad no se escapa el Barcelona. En la temporada 2004/2005 el Gramenet dio la campanada ante los de Frank Rijkaard. Un equipo azulgrana en el que ya militaban estrellas como Deco, Ronaldinho o Eto'o.
Años atrás, en la 2001/2002, el Barça de Rexach recibió un correctivo importante ante el Figueres. El humilde conjunto catalán eliminó a sus vecinos por la mínima en la prórroga de los treintaidosavos y llegó a plantarse en semifinales después de apear a Novelda (octavos) y Córdoba (cuartos). Su aventura terminó contra un Deportivo histórico que terminaría llevándose la Copa.
Sin aprender, Van Gaal volvió a reeditar otro fracaso copero en 'Camp Barça' un año después. Esta vez fue ante el Novelda, con una derrota por 3-2 que los suplentes del equipo azulgrana no pudieron evitar.
Del Ejido al Numancia
Otros conjuntos también protagonizaron noches mágicas para sus aficionados. Como el Polideportivo Ejido, que endosó una manita al Villarreal en 2010; o el Guadix, que se metió en cuartos de final tras eliminar al Valencia de Cúper en 2001, que por aquel entonces tenía jugadores como Ayala, Deschamps o Angulo en su plantilla.
Mención a parte merece el Numancia de 1996. Los sorianos eliminaron a tres Primeras como Sporting de Gijón, Racing de Santander y Real Sociedad, clasificándose para cuartos de final y midiéndose al Barça de Cruyff. Todo se saldó con un empate a dos en la ida que fue una sorpresa y una derrota 3-1 en la vuelta que terminó con el sueño del equipo.
Un Castilla legendario
Lo que siempre quedará en la memoria de todos los madridistas es la final de la Copa del Rey de 1980. El primer equipo de Boskov y el Castilla disputaron la gran cita por el título en el Santiago Bernabéu. Los mirlos merengues dirigidos por Juanjo eliminaron a Athletic Club, Real Sociedad y Sporting de Gijón en las rondas previas a la final.
A partir de aquella edición se prohibió con una nueva normativa que los filiales participaran en la Copa del Rey. Una gesta que nunca se volvió a ver en el torneo.
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