El coronavirus sigue afectando a las competiciones deportivas. Esta vez, ha tocado en Suiza, donde el Departamento de Justicia y Seguridad del país ha expresado, a través de un comunicado, que no autoriza la celebración del partido de la vuelta de octavos de la Europa League entre el Fussballclub Basilea y el Eintracht de Frankfurt previsto para el jueves 19 de marzo.
En Suiza han querido cortar por lo sano. Han decidido suspender el partido sin contemplar, tan siquiera, la posibilidad de jugar el encuentro a puerta cerrada como medida preventiva ante el contagio del coronavirus.
"La policía de la ciudad de Basilea decidió no aprobar la celebración de este partido, con el fin de proteger la salud de la población y en el contexto de las medidas oficiales para frenar la propagación del coronavirus, así como la carga de trabajo del equipo médico de Basilea", reza el comunicado.
El gobierno suizo ha querido explicar el porqué no han permitido que el partido se jugase a puerta cerrada. Se basan en que, como ha pasado en encuentros recientes, el hecho de que se dispute un choque sin permitir que los hinchas entren al estadio, no evita que estos viajen a la ciudad para apoyar al equipo. Es decir, que aunque no tuviesen acceso al estadio, se desplazarían igualmente a la ciudad de manera que el peligro de propagar el virus seguiría latente.
A raíz de esto, el CEO del Basilea, Roland Heri, se ha pronunciado a través de la cuenta de Twitter oficial del club mediante un vídeo en el que pide comprensión: "Las situaciones especiales requieren una dosis especial de comprensión". De momento no hay fecha oficial para la disputa del encuentro.
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