No habrá revolución en el Barça: las vacas sagradas no quieren irse y no hay dinero para fichajes
Ni Piqué ni Jordi Alba o Busquets saldrán del Barcelona después de la "humillación histórica", pero sí que Luis Suárez ya sabe que Koeman no cuenta con él.
24 agosto, 2020 23:35Noticias relacionadas
El 2-8 del Bayern Múnich al Barcelona provocó que los cimientos del club blaugrana se tambaleasen. La derrota calificada como "humillación histórica" en todo el mundo dejó su primera víctima con la destitución de Quique Setién, quien había llegado al banquillo culé en el mes de enero en sustitución de Ernesto Valverde.
La primera medida tomada por la directiva presidida por Josep Maria Bartomeu fue la de contar con Ronald Koeman como nuevo técnico. El holandés ya había dicho que no en enero, en la primera gran crisis tras caer en la Supercopa de España, pero ahora el que había venido estando en el cargo de seleccionador de la Oranje dijo sí a la propuesta azulgrana.
"Hay jugadores de cierta edad que podéis tener dudas sobre el rendimiento, hay que respetar a todos los jugadores. Nosotros buscamos lo mejor para el club, pero si hay que tomar decisiones, las tomaremos. Ha ido todo muy rápido, desde ya estamos trabajando y hablando sobre decisiones que tenemos que tomar. Pero no me gusta decir nombres, por respeto a los jugadores", dijo el neerlandés en su presentación.
Sobre la mesa se pusieron entonces los nombres de las vacas sagradas. Futbolistas como Luis Suárez, Jordi Alba, Gerard Piqué o Sergio Busquets fueron señalados por la debacle en la Champions League, pero la salida de todos ellos es muy complicada por sus contratos y sus altas fichas. Si el plan inicial era prescindir de los citados pesos pesados, el guion ha ido cambiando con el paso de los días.
Luis Suárez y el deseado Lautaro
Luis Suárez es uno de los elegidos para abandonar Can Barça. Así se lo ha hecho saber al delantero uruguayo el propio Ronald Koeman, pero el futbolista ya ha comunicado al técnico y al club que su deseo es seguir formando parte del conjunto blaugrana aunque su rol cambie y comience a ser suplente.
Su venta es necesaria para el plan de futuro del Barcelona, pero también está el punto importante de que Suárez es el mejor amigo de Messi en el Barça y la felicidad del argentino ha sido un punto primordial en cualquier proyecto para la directiva, ya que incluso se ha especulado con que por la cabeza del '10' se ha pasado la idea de irse.
La campaña para que el charrúa abandone el Camp Nou ha comenzado y apunta a ser brutal. Su alta ficha es el gran escollo para su continuidad porque en esta temporada 2019/2020, la del coronavirus, desde Can Barça se han dejado de ingresar unos 300 millones de euros por la crisis de la Covid-19.
Además, hay otro punto caliente en la deseada salida de Luis Suárez y esto tiene que ver con el fichaje de Lautaro Martínez. El argentino solo llegará a la Ciudad Condal si antes ha salido el delantero uruguayo. La operación ha tenido sus altos y sus bajos, las conversaciones han existido entre el club catalán y el Inter de Milán, pero hace ya varios meses que se congeló la negociación.
Lautaro es el favorito, una vez es inviable el regreso de Neymar al Barça, incluso con la derrota del PSG en la final de la Champions frente al Bayern Múnich. Pero en el Inter no están dispuestos a regalar a uno de sus grandes activos, es por esto que o se vende a Luis Suárez y se recauda una importante cantidad o el sueño del argentino se quedará en nada.
Se quedan
El Barcelona comenzará la temporada de La Liga el próximo 19 de septiembre, después de alcanzar la ronda de cuartos de la Champions League. Menos de un mes para el regreso de los culés a la competición y muchas cuentas pendientes. El tiempo apremia y es por eso que de la primera lista de transferibles se caen los nombres de Piqué, Jordi Alba y Busquets.
Esa revolución que se avecinaba tras la debacle frente al Bayern se convierte en un lavado de cara a la galería y es que los futbolistas culés se han devaluado en el mercado de fichajes, más aún después de revelarse qué jugadores estaban en la rampa de salida.
Piqué fue el primero en poner su puesto a disposición del club azulgrana: "Yo me ofrezco. Si tiene que venir sangre nueva y cambiar la dinámica, soy el primero en irme y dejarlo". "Ahora sí hemos tocado fondo. Creo que todos tenemos que mirar y reflexionar internamente y decidir qué es lo mejor para el club y para el Barça que es lo más importante", dijo el central después de caer en la Champions.
Pero no hay ofertas ni se espera que llegan propuestas ni por él ni tampoco por las otras vacas sagradas señaladas. Esa revolución y limpia del vestuario no pasará a mayores y los futbolistas a los que se espera dar salida en las próximas semanas son otros que ya estaban en el disparadero y entre los que podría no estar Coutinho, quien no está descartado para que forme parte de la plantilla para la 2020/2021.
Tres ventas
La necesaria renovación en Can Barça se limita a lo que suceda con Luis Suárez y a otras tres ventas: Umtiti, Arturo Vidal y Rakitic. Los tres ya saben que no entran en los planes de Koeman para el futuro del proyecto azulgrana. Estas bajas ya se conocían de antemano, en especial la del centrocampista croata, del que incluso se ha especulado con un posible regreso al Sevilla.
El caso de Vidal es más llamativo pues ha estado entrando en el once titular del Barcelona y el más complicado lo representa un Umtiti que no ha acabado de dar el rendimiento que se esperaba cuando se le fichó. Desde la Ciudad Condal ya han avisado incluso del temor que tienen en el club porque el central francés no llegue a superar un reconocimiento médico en otro equipo para su fichaje.
Mientras el mediocentro chileno deberá negociar con sus abogados los términos de salida y cómo cobra el año que le resta para la finalización de su contrato, Umtiti no está dispuesto a que su salida del club le salga barata al Barcelona. En pie de guerra, el defensa ha sido un fiasco y es que el dato es para tener en cuenta: solo ha disputado 30 partidos de los últimos 120 posibles. Su rodilla izquierda no está bien y la apuesta por él por otro equipo cualquiera se ve en peligro por este motivo.
Messi y el plan de fichajes
Así las cosas, la revolución en el Barça irá más por los nombres de Pedri, Riqui Puig y Araujo. Futbolistas jóvenes y con proyección que se alejan de los fichajes galácticos de un coste elevado. En la agenda de Koeman también se posicionan otros jugadores como Van de Beek, Gayà o Eric García, quien ha recibido la llamada de Luis Enrique para enrolarse con la selección española.
Estos últimos han demostrado su valía en estos últimos tiempos y destaca sobre todo un Van de Beek que ya el pasado verano estuvo muy cerca de abandonar el Ajax de Ámsterdam para jugar en el Real Madrid, pero que finalmente se quedó en Holanda por la negativa de Zidane a su fichaje.
La llegada del centrocampista es muy probable por la presencia de Ronald Koeman en el banquillo del Camp Nou, pero la pregunta que se hacen ahora todos los culés es si esa esperada revolución tras un año en blanco se quedará en solo tres caras nuevas en el once titular, si es que llega finalmente Lautaro Martínez, y sobre todo qué va a pasar con Leo Messi.
El '10' blaugrana ha sido el buque insignia del club durante más de diez años. Un futbolista único, pero que todavía no ha renovado y que está en total desacuerdo con la manera de gestionar el Barcelona que tienen Bartomeu y compañía. Habrá que esperar a ver qué decide Messi, quien de salir si que podría liberar el suficiente dinero como para que el Barça pueda acudir al mercado con plenas garantías.
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