El FC Barcelona logró el triunfo en su primer partido amistoso de una pretemporada anómala. El cuadro culé ganó ante el Gimnàstic por un cómodo 3-1 y Koeman consiguió sumar su primera victoria como entrenador del equipo blaugrana. Un duelo donde, además, se vio a Leo Messi vestir la elástica culé tras su petición de abandonar el club.
El delantero argentino no vio puerta y se retiró tras 45 minutos sobre el terreno de juego. Siguió, como el resto de sus compañeros, el plan de rotaciones de un Koeman que quería evitar cualquier lesión en un duelo sin mayor trascendencia y con el debut en La Liga marcado en el calendario.
La actuación de Messi fue discreta. No lideró en ataque y se marchó sin haber marcado. Sin embargo, sabía que cada uno de sus movimientos iba a ser analizado con lupa tras la polémica de estas últimas semanas. Koeman, como era de esperar, tuvo que analizar su actuación al término del partido. El técnico, lejos de rendirse a Messi, fue sincero.
El nuevo entrenador del FC Barcelona reconoció que Messi demostró "el mismo ánimo que el primer día". Y es que el '10' "está entrenando bien" y más después de haberlo hecho también en su día libre. Sin embargo, Koeman reconoció que aún le queda por mejorar en el aspecto físico.
"Sabe perfectamente que tiene que mejorar físicamente, como todos", afirmó el técnico holandés. Pese a que "su calidad habla por sí misma", el atacante todavía tiene trabajo por delante. Entre otras cosas porque, a diferencia de la mayoría de sus compañeros de vestuario, comenzó los entrenamientos en Can Barça más tarde y como consecuencia de su negativa a seguir en el FC Barcelona.
Messi, cabizbajo durante un partido del FC Barcelona
Koeman extendió esa falta de fuerza física a todo el equipo y de ahí que optara por que "cada uno" pudiera "participar 45 minutos". "He visto cosas buenas con los dos primeros goles y jugadas por banda donde se ha aprovechado el espacio". A partir de este primer encuentro, el entrenador subrayó que deberán "hacer cosas más tácticas" para así "afrontar una liga complicada".
Respecto a los fichajes, que pudieron lucirse con su nueva elástica, Koeman destacó el "gran talento" de un Pedri de 17 años que "es un fichaje importante para el futuro", aunque dejó en duda los minutos que tendrá: "Ya veremos cuánto puede participar". Igualmente, calificó como "un gran fichaje" a un Trincao que convenció al técnico "posicionalmente".
Más allá del triunfo, del regreso de Messi y de los primeros análisis a los fichajes, Koeman quiso recalcar que "no es una pretemporada normal", puesto que contarán "solo" con cuatro semanas y donde, además, algunos jugadores se han ausentado por las convocatorias de las selecciones.
Messi, un año más de culé
El delantero argentino no ha vivido días tranquilos. Nada más enviar el burofax a la directiva para pedir abandonar el club se desató toda una crisis institucional y una batalla entre el club y el jugador. Los de Bartomeu defendían que solo le dejarían marcharse a cambio de pagar su cláusula. El jugador, por su parte, mantuvo que podía abandonar la entidad gratis debido a una cláusula de su contrato.
Finalmente, y tras declararse en rebeldía, Messi decidió quedarse en el Barça. Sin muchas ganas ni expectativas, simplemente para evitar un conflicto judicial con el club de su vida. "Hace tiempo que no hay proyecto ni hay nada, se van haciendo malabares y van tapando agujeros a medida que van pasando las cosas", insistió el capitán.
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