El deporte a veces regala historias sorprendentes. Especialmente el fútbol, una disciplina que implica una enorme carga de emotividad y en la que se ponen los sentimientos a flor de piel. Por algo es el deporte rey, pero también por la gran cantidad de personas y, por ende, de dinero que mueve. Todos quieren estar cerca de él y, si pueden, sacar un rédito personal, ya sea económico o emocional.
En esa tesitura se encuentra la pareja de actores formada por Ryan Reynolds y Rob McElhenney que han puesto su punto de mira en un equipo galés muy particular y que pronto será de su propiedad. Una historia rocambolesca que ha terminado con dos estrellas de Hollywood adquiriendo un club muy especial y que guarda una leyenda muy singular. La verdad es que la situación actual que vive el Wrexham es prácticamente de película.
Un clásico de Gales
A pesar de que su nombre pueda sonar desconocido para el gran público, incluso para el aficionado al fútbol europeo, el Wrexham es un club histórico de Gales, uno de los más grandes del país y que compite históricamente con otros clubes de mayor nombre y mayor repercusión. Fue fundado en el 1864, es decir, hace 156 años, por lo que se trata de una entidad con un pasado muy extenso.
Los dos clubes que son sus grandes rivales históricos son el Cardiff y el Swansea, dos conjuntos con un nombre más reconocible y mucho más conocidos para el gran público y que tienen una mayor presencia en grandes ligas como la Premier League. Y precisamente la Premier League, o mejor dicho, el fútbol inglés, es muy importante para ellos, ya que son los tres clubes galeses que disputan competiciones inglesas.
Tanto Cardiff como Swansea como Wrexham forman parte de las diferentes divisiones del fútbol británico a pesar de ser clubes galeses. Y todo fue porque en 1921, la reducida cantidad de equipos que había en Gales no permitía mantener una liga de cierto nivel para que estos grandes clubes compitiesen en ella. Por ello, tuvieron que tomar la decisión de abandonar su tierra para batallar contra equipos muchos más poderosos, pero consiguiendo así su supervivencia.
La liga de fútbol de Gales se integró en el sistema de ligas del fútbol inglés y el país permaneció sin una competición propia hasta el año 1992. Sin embargo, estos tres equipos que habían preferido competir en divisiones inglesas de mayor nivel, fueron excluidos de las competiciones de su país y no pudieron formar parte de ellas.
A pesar de ello, el Wrexham está considerado como el rey de la Copa de Gales, ya que es el conjunto que más trofeos ha ganado, ostentando un récord histórico gracias a sus 23 conquistas. Su primer título lo consiguió en 1873 y su última conquista fue en 1995. Además, cuenta con 5 FAW Premier Cup y un Football League Trophy. Ryan Reynolds y Rob McElhenney llegan a un club poco conocido, pero que no tiene sus vitrinas vacías.
Equipo y afición
Si algo caracteriza a este particular equipo que desde ahora lo será aun más, es su particular modo de organizarse. Se trata de un equipo con una esencia muy arraigada y que depende en gran medida de sus aficionados. Tanto es así que, hasta que Ryan Reynolds y Rob McElhenney formalicen su compra de manera oficial, los propietarios de este equipo seguirán siendo sus aficionados, y es que pertenece a sus 2.000 socios.
Esto provoca que el Wrexham sea como una gran familia en la que todos trabajan para que el club salga hacia delante y supere los graves problemas que atraviesa ahora mismo y que se llevan sucediendo durante años. A pesar de su peso histórico en Gales, este equipo milita actualmente en la quinta división del fútbol inglés, la Conference Premier.
Esta división le da mayor magia todavía a su historia, ya que la Conference Premier es la primera división del fútbol inglés que combina clubes profesionales con clubes amateur. El Wrexham lleva instalado en esta categoría desde el año 2008, pero no fue hasta el año 2011 cuando sus graves problemas llevaron a sus fans a tomar el control y a repartir la propiedad del equipo entre sus 2.000 socios, creando la gran familia que es hoy en día.
Debido a esta particularidad, han sido precisamente estos 2.000 aficionados quienes han tenido que estudiar el proyecto planteado por la pareja de actores de Hollywood, el cual ha sido aprobado con el 98% de los votos en lo que ha sido un éxito rotundo y un momento histórico para un club fundado hace más de 150 años.
Un proyecto ambicioso
La aventura de Ryan Reynolds y Rob McElhenney no ha hecho más que empezar. Su intención es llegar para quedarse y apostar fuerte y decididamente por el Wrexham con la intención de llevarlo a cotas muy altas próximamente. No se trata de un capricho o de un juego. Se han propuesto volver a hacer grande a este equipo y por ello quieren invertir y potenciar su crecimiento.
El proyecto presentado por los dos actores ya ha sido aprobado por sus 2.000 socios, ante quienes tuvieron que presentar una idea que surgió a principios del mes de noviembre. Todo se ha desarrollado muy rápido, pero ahora llega el momento de la verdad, el momento en el que tendrán que ejecutar la compra de la entidad.
Después de eso, llegará el momento de la inyección de capital, la cual será de 2 millones de libres, es decir, unos 2.200.000 euros, una cantidad astronómica para un club que se sitúa en la quinta división del fútbol inglés y que compite contra rivales amateur. Reynolds y McElhenney no quieren perder el tiempo y por ello lo apostarán todos desde el principio.
Con este dinero pretenden mejorar la infraestructura del club, profesionalizarlo, mejorar sus instalaciones y realizar fichajes que permitan ir subiendo de categoría para entregarle a sus aficionados el club que merecen después de tantos años de esfuerzos y sacrificios. La gran familia que siempre serán tendrá que ocupar su puesto en la grada, cuando se pueda, para disfrutar de lo que un día ellos mismos levantaron con sus manos piedra a piedra.
Fútbol y famosos
El caso del Wrexham y de la pareja de actores formada por Ryan Reynolds y Rob McElhenney ha supuesto un caso muy particular en Gales y en el fútbol galés, pero no en el fútbol mundial y ni mucho menos en el deporte. Cada vez son más las celebrities que se pasan al mundo de la pelota con la intención de adquirir un club o ser parte importante de él.
Se podría afirmar que la historia de Ryan Reynolds y Rob McElhenney con el Wrexham ha sido la última de una larga lista que tiene nombres muy curiosos relacionados con la música o con el cine. Un caso muy especial y no muy conocido fue el de Elton John que, en diferentes etapas, llegó a ser presidente del Watford durante la friolera de 26 años. Además, el cantante afirmó que su amor y dedicación por el club le permitieron sobrevivir en sus peores años de vida. Una auténtica barbaridad.
Otro ilustre de la música como Robbie Williams se convirtió en accionista del equipo de su ciudad, el Port Vale, del cual se declara un gran aficionado, además de considerarse un gran loco del fútbol. A su lado se podría poner la figura de Rod Stewart, que además de ser un hincha del Celtic, en los años 70 invirtió en un equipo de la MLS, en Los Ángeles Aztecs, club por el que pasaron leyendas como George Best o Johan Cruyff.
Otro caso muy sonado en el mundo de la música fue el de Rihanna, que tuvo durante un tiempo el imperioso deseo de comprar un equipo de fútbol. La súper estrella mundial estaba convencida de que era la inversión, o el capricho, que necesitaba en ese momento, pero finalmente sus negociaciones no llegaron a buen puerto y se quedó con las ganas.
Quien sí ha conseguido cumplir su sueño de poseer su propio equipo de fútbol, o al menos ser uno de los propietarios, es otro actor como Ryan Reynolds y Rob McElhenney. Se trata del conocido Matthew McConaughey quien, en un proyecto unido a su mujer, quiso formar parte de la creación de la franquicia del Austin FC, un club que militará próximamente en la MLS y en el que pretenden crear un mega proyecto deportivo y social que sea beneficioso para la capital del estado de Texas.
Pero sin duda, uno de los casos más sonados lo protagonizó la exmodelo de la revista Playboy Anamaria Prodan, que tras una excelente carrera como modelo se pasó al mundo de las agencias de futbolistas y ahora ha decidido ir más allá. Hace poco tiempo se lanzó en la inversión más arriesgada de su vida y adquirió el FC Hermannstadt de la primera división de Rumanía. Diferentes pruebas de que el fútbol y los famosos están cada vez más unidos.
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