Griezmann rescata a un Barça de dos caras que alcanza al Madrid en Liga

Victoria del FC Barcelona frente al Athletic en un gran partido de fútbol que, como la final de la Supercopa de España, no desmericó en absoluto. El equipo local fue mejor en una primera parte realmente buena, con juego fluido y mucha verticalidad. Messi fue el líder estelar de un Barça que soñaba con recuperarse [FC Barcelona 2-1 Atheltic: Narración y estadísticas]. 

Sin embargo, en la segunda mitad se pudo ver la otra cara de este equipo. Errático en la salida de balón, superado por la presión del Athletic y con mucha fragilidad defensiva. Los de Koeman recibieron el empate con un gol de Jordi Alba en propia puerta y estuvieron un tiempo cerca de caer a la lona, pero el gol de Griezmann apareció para salvarles. Con este triunfo, empatan en la clasificación con el Real Madrid. 

El partido entre el FC Barcelona y el Athletic, última final de la Supercopa de España, dejó imágenes espectaculares desde el principio, y es que los culés salieron a por todas desde el primer minuto. Messi avisó en el minuto cuatro a los visitantes con una ocasión inmejorable. El argentino realizó una cabalgada imperial por la banda derecha, se coló en la zona de castigo por el pico del área y cuando llegó ante Unai Simón, no pudo batirle, ya que el meta del Athletic realizó una intervención providencial. 

El FC Barcelona comenzó avasallando al Athletic con un gran fútbol. Los de Marcelino García Toral estaban totalmente superados, sin saber como contrarrestar el vendaval de fútbol ofensivo de los de Koeman, cuya puesta en escensa era inmejorable. La velocidad y movilidad de los tres delanteros causó estragos en la defensa bilbaína, que a punto estuvo de ver como Griezmann abría el marcador, pero el francés falló en la definición. 

El asedio no se detenía y Messi estuvo a punto de hacer el primero otra vez. Tras una jugada en la que Barça movió el esférico de una banda a la otra, el balón terminó cayendo rechazado a los pies de Pjanic. El jugador bosnio del Barça remató en semifallo y el balón le cayó a Messi dentro del área que conectó un buen remate con el pecho de primeras, pero su intento se marchó alto por poco. 

Sin embargo, en el minuto 19 llegó la gran genialidad del partido. Mateu Lahoz picaba en la exageración de Messi y le concedía una falta en la frontal que fue como un caramelo para el argentino. Colocó el balón con mimo, lo acarició sutilmente son su bota izquierda y lo depositó en la escuadra de la meta de Unai Simón. Ni él ni Yeray, que cubría el poste, pudieron hacer nada por evitar el tanto. 

Minutos después, una combinación entre Messi y un sorprendente Araujo estuvo a punto de significar el 2-0, pero el disparo del central, que había roto a su defensor en velocidad, se marchó algo desviado. Los de Koeman eran un auténtico ciclón que no dejaba respirar al Athletic, obligado a jugar en su campo sin tiempo para pensar. Este gran nivel se alargó durante la primera media hora del encuentro, hasta que los locales decidieron bajar una marcha. No obstante, Dembelé la tuvo de nuevo antes del descanso. 

Messi celebra un gol ante el Athletic EFE

El Barça salió bastante intenso tras el paso por vestuarios, pero sin el mismo brillo. Sin embargo, se encontraron con un tanto en contra que no esperaban. El Athletic aprovechó una vez más una llegada por banda y un centro lateral para crear peligro. Balón colgado al área desde la derecha para De Marcos que aparecía por el segundo palo e intervención de Jordi Alba que, en semifallo, introducía el balón en su propia portería. El lateral del Barça no se lo podía creer y a pesar de pedir falta insistentemente, tuvo que asumir que las tablas regresaban al electrónico. 

Bajón del Barça

Este gol trajo los peores minutos del Barça y los mejores del Athletic. Los locales quedaron noqueados durante gran parte del segundo tiempo mientras que el equipo de Marcelino aprovechaba su velocidad para salir con peligro a la contra. Siempre por banda, como puñales, hasta inquietar la meta de Ter Stegen. 

El Barça reaccionó con una buena ocasión de Pjanic en el minuto 58. Gran centro de Griezmann desde la banda izquierda y el centrocampista del Barça aparecía en segunda línea para cabecear con fuerza. Intervención salvadora de Unai Simón que daba alas a los suyos. Poco a poco, los de Koeman fueron recuperando terreno y el partido se igualó, convirtiéndose en un toma y daca entre ambos equipos. Dembelé pidió penalti en el minuto 70 por una posible falta dentro del área de Muniain, aunque Mateu Lahoz lo tuvo claro. 

Acto seguido llegó el tanto de la tranquilidad para el Barça. Dembelé se puso al mando de las operaciones, desbordando por velocidad y en estático, y aprovechando una excelente subida de Mingueza por banda derecha, le sirvió un balón medido a la espalda del lateral. Centro raso y Griezmann, que esperaba solo en el área, solo tuvo que aparecer para empujarla y marcar el tanto decisivo. 

Cuando mejor estaba el Athletic, aprovechando la velocidad de Williams para poner en problemas al Barça, los culés asestaron el golpe definitivo. Poco más sucedió en los minutos finales donde el equipo de Koeman supo aguantar bien el resultado ante un Athletic que había gastado ya todas sus balas. 

FC Barcelona 2-1 Athletic

Barcelona: Ter Stegen; Mingueza, Umtiti, Araujo, Jordi Alba; Frenkie de Jong, Pjanic (Sergi Roberto, 67'), Pedri; Dembélé (Braithwaite, 87'), Griezmann (Lenglet, 84') y Messi.

Athletic de Bilbao: Unai Simón; Capa (Lekue, 84'), Yeray, Íñigo Martínez, Yuri; De Marcos (Berenguer, 66'), Dani García, Vencedor (Vesga, 66'), Muniain; Williams (Villalibre, 84') y Raúl García.

Goles: 1-0, 20' Messi. 1-1, 49' Jordi Alba, propia puerta. 2-1, 74' Griezmann.

Árbitro: Antonio Miguel Mateu Lahoz (Comité Valenciano). Mostró cartulina amarilla a Raúl García (32'), Yerai (39'), al técnico del Athlétic Marcelino Garcia Toral (39'), De Jong (47'), Alba (50') y Capa (77'),

Incidencias: Partido de la vigésima primera jornada de LaLiga disputado en el Camp Nou sin presencia de espectadores por las restricciones sanitarias. Antes del inicio del encuentro se guardó un minuto de silencio en memoria de Justo Tejada, exjugador del Barcelona, de los años cincuenta, fallecido recientemente.