Gerard Piqué finalizó el último duelo del FC Barcelona con molestias en el muslo. Pese a ser protagonista por su primer tanto, clave en el resultado final, el central azulgrana no terminó en las mejores condiciones físicas. Por ello, los servicios médicos del equipo ya le han pedido que rebaje el nivel y que se tome unos días de descanso. La respuesta del central se desconoce, pero su compromiso con el equipo pueden llevarle a forzar.
El zaguero ya tuvo varios problemas de lesiones la temporada pasada. Y de ahí que la preocupación entre los responsables azulgranas sea tal. Piqué tendrá un puesto fundamental en el equipo esta campaña y una baja al principio de La Liga puede suponer un duro varapalo para la plantilla. Según apunta TV3, el mensaje de los servicios médicos es claro: que descanse al menos una semana. Eso, si se cumple bien por decisión del central como de Ronald Koeman, supondría no convocarle para el duelo ante el Athletic Club en San Mamés.
El equipo entrenado por Marcelino ya le puso en problemas al Barça la temporada pasada y esta campaña, reconstruyendo el equipo en la era post-Messi, cualquier resultado es clave para reforzar la confianza en la nueva plantilla azulgrana. Este viernes, cuando Koeman dé tanto rueda de prensa como convocatoria para el duelo del sábado, se conocerá la decisión y la situación concreta de Piqué.
El zaguero estuvo de baja la temporada pasada hasta 29 partidos. Piqué tuvo que apartarse de los terrenos de juego casi 120 días por dos problemas diferentes de rodilla. Primero llegó la lesión de rodilla y posteriormente una rotura de ligamentos que convirtieron la 2020/2021 en una temporada más que dura para el catalán.
Si el objetivo de Piqué es aguantar, tendrá dos partidos por delante. Sería la mejor noticia para el Barça en el plano deportivo, pues se asegurarían tener al central tanto ante el Athletic como frente al Getafe. Luego llegaría el parón de selecciones y ahí Piqué podría descansar sin perjudicar al esquema de Koeman.
Una semana clave
Los últimos días de Piqué no han sido nada tranquilos. El central, consciente del papel que juega esta temporada, asumió una rebaja salarial clave para que el Barcelona inscribiera para el debut liguero a Eric García y Memphis Depay. Además, tras el enfrentamiento ante al Real Sociedad, el zaguero dio detalles de cómo se había producido todo y lo que estaba por venir.
Un mensaje muy aplaudido y que reforzó su posición como capitán. Piqué adelantó que "todos los capitanes" están a favor de la rebaja salarial para ayudar al club, confirmando así que las negociaciones con Busquets, Jordi Alba y Sergi Roberto habían llegado a buen puerto. "Todos los capitanes teníamos la intención de ajustarnos a lo que el club requería desde un primer momento. Es la decisión que hemos tomado, estamos orgullosos de eso y con ganas de seguir rindiendo y haciendo buen fútbol", espetó.
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