Luis Suárez es el rostro que mejor representa la situación del Atlético de Madrid tras la derrota contra el Sevilla. El equipo se queda muy tocado en la pelea por La Liga (a 13 puntos del Real Madrid y a 8 del Sevilla), mientras que su delantero se encuentra en una sequía grave con el gol. En el Sánchez Pizjuán, fue sustituido antes de cumplirse la hora de partido y se marchó del campo con un enfado monumental.
Diego Pablo Simeone sustituyó a Suárez en el minuto 56. Hasta entonces, el delantero chárrua apenas había tenido protagonismo en el partido y en el marcador lucía un empate a uno. En su búsqueda del gol de la victoria, el técnico rojiblanco prefirió contar en el campo con Matheus Cunha en lugar del uruguayo y este estalló en su camino al banquillo y una vez se sentó en su sitio en él.
Cunha entraba en el campo y Suárez se iba de él andando por detrás de la portería del Sevilla. Las cámaras le enfocaban y este seguía su camino mientras negaba la cabeza y decía algo con un rostro claro de enfado. Al sentarse en el banquillo se quitó de forma brusca el vendaje que suele llevar en una de sus muñecas.
Ya son siete partidos seguidos que Luis Suárez no ve puerta. La última vez fue ante el Valencia (3-3) el pasado 7 de noviembre y de eso va camino de cumplirse dos meses si el '9' no moja el miércoles que viene contra el Granada, el último partido del año para los rojiblancos. De esos siete partidos, solo ha sido titular en cuatro de ellos.
Lesión de Llorente y racha histórica
Marcos Llorente se retiró lesionado en el minuto 40 del partido de este sábado contra el Sevilla, en el que sufrió un tirón en los isquiotibiales de la pierna derecha, según los gestos y las imágenes de su dolencia muscular, en la que inmediatamente se puso hielo en el banquillo. El club no especificó más allá de que padeció unas "molestias", según informó en sus redes sociales.
En un mar de problenas, el Atlético de Madrid, doblegado por 2-1 frente al Sevilla en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán, sufre su peor racha en La Liga en toda la era Simeone, con tres derrotas consecutivas que no había padecido hasta ahora desde que lo dirige el técnico argentino, hace ya casi una década.
A los encuentros perdidos contra el Mallorca en el Wanda Metropolitano (1-2) y contra el Real Madrid en el Santiago Bernabéu (2-0) se añadió este sábado el 2-1 en Sevilla.
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