Luis Enrique continúa haciendo pruebas de cara a la próxima edición del Mundial de Fútbol. Catar 2022 comienza en el mes de noviembre y España apunta a estar entre las favoritas al título. Son muchos los jugadores que quieren estar entre los elegidos. Pero no todos pueden estar en la lista definitiva para disputar la Copa del Mundo.
Ahora, un futbolista de La Liga se postula para representar a España. Nació a muchos kilómetros de aquí. Lo hizo en Rosario, en Argentina. Luis Ezequiel Ávila, más conocido como el 'Chimy' Ávila, se ofrece a Luis Enrique. Asegura que si le llaman desde la Selección, su respuesta será un 'sí' rotundo.
Así lo confirma durante una entrevista con TNT Sports: "Tengo la sangre argentina, pero muchas veces mi cabeza piensa qué estoy haciendo mal o qué pasa que no tengo la oportunidad". "Tengo los documentos para poder representar a España y, si me citan a las dos (selecciones) juntas, sería difícil elegir. Pero si me llaman de España le diría que sí, no lo dudo", afirma el futbolista de Osasuna en el medio argentino.
Asuntos personales
Además de este ofrecimiento, el 'Chimy' Ávila también cuenta anécdotas tan duras como la siguiente: "He estado jugando en mi barrio y vi cómo le disparaban a gente delante de mí por un penalti o por no querer pagar las cosas cuando perdió". Una vida complicada la del jugador rosarino.
"Tengo dos o tres de los veinte amigos que éramos, los que no están privados de su libertad. A otros, cuando voy a Argentina, los voy a ver a un cementerio porque es la realidad de los barrios humildes y de la gente que se cría en esos ambientes", continúa relatando el futbolista.
Recuerdo con su hermano
El argentino también recuerda un capítulo vivido con su hermano Gastón Ávila, el futbolista de Boca Juniors: "Nos criamos jugando en el barrio. Una vez jugamos una final el equipo de él contra el mío y cuando nos enfrentamos yo le iba tranquilo a trabar y él me fue con todo y me tiró a una zanja. En la próxima jugada le pegué una piña y lo desmayé. Me asusté, empecé a llorar y después fue una tranquilidad cuando se despertó y lo abracé".
"Pero después de ese día, que fue un 24 de diciembre, noche de Navidad, le dije a mi familia que no iba a jugar nunca más contra mi hermano. Creo que soy muy buena persona, pero cuando entro al campo me desconozco. Siempre les digo a los chavales que dentro del campo me peleo con cualquiera, pero lo voy a defender. También les digo que defiendan ese balón que es el que les puede dar la comida a mis hijas", sentencia el 'Chimy'.
[Más información - Jordi Alba: "¿Mbappé y el Real Madrid? No es lo mismo jugar en el PSG que en el Santiago Bernabéu"]