Ansu Fati regresó este lunes a los entrenamientos con el Fútbol Club Barcelona. Dos meses se ha mantenido alejado de los terrenos de juego el joven futbolista por su última lesión. El internacional español decidió entonces no pasar por quirófano y ahora está listo para volver.
Aunque todavía habrá que esperar un poco más para verle en acción. En el Barça no van a correr ni un solo riesgo con la reaparición del '10' azulgrana. Sobre todo porque hay un nivel alto de riesgo de recaída. De producirse esta, la operación sería ineludible y varios meses de baja también.
En el Barcelona no tienen prisa. El objetivo es que Ansu Fati vaya integrándose en la dinámica de grupo poco a poco. Aunque hay dos fechas marcadas en rojo en el calendario. Alrededor de tres semanas de espera para verle de nuevo enfundándose la camiseta blaugrana.
Parte de lesiones
En lo que va de temporada 2021/2022, el futbolista de Guinea-Bisáu ha sufrido cuatro parones obligados por las lesiones. La primera de ellas nada más comenzar el mes de septiembre. Catorce días de baja y tres partidos ausente fueron el desenlace de este periodo. A finales de octubre, sufrió unos problemas en su rodilla que le mantuvieron alejado de los terrenos de juego cinco días, perdiéndose dos encuentros más.
Lo peor estaba aún por llegar. En el partido frente al Celta de Vigo que tuvo lugar en noviembre, las pesadillas de Ansu Fati regresaron. Tras una carrera, el jugador notó algo en la zona posterior de su pierna izquierda. Inmediatamente se dio cuenta de que se había roto. El club catalán publicó después el parte médico: lesión muscular en el bíceps femoral del muslo izquierdo.
Comenzó así un nuevo proceso de recuperación. Algo que ha ido ligado a la trayectoria profesional del futbolista de 19 años (cumple 20 el próximo mes de octubre). 65 días de baja y once encuentros sin poder ayudar a sus compañeros en el campo. Reapareció después con fuerzas renovadas y con la ilusión creciendo entre el barcelonismo por poder disfrutar de su joven estrella.
Sin embargo, una nueva piedra se colocó en su camino. En el duelo contra el Athletic Club, cuando el partido de la Copa del Rey ya se encontraba en el tiempo de la prórroga, Ansu Fati emprendió el camino a los vestuarios, tapándose la cara para ocultar las lágrimas que corrían por su cara. La pesadilla se revivía diez después de reaparecer en el verde.
Nueva lesión y muchas dudas entre el futbolista, el cuerpo técnico, el médico, el entorno del propio jugador y el club sobre el plan a seguir. Otra vez el muslo. Y otra vez sobrevolando el fantasma del quirófano. Se quiso ir despacio con él. Dándole minutos de manera progresiva. Pero ni siquiera eso fue suficiente. Ante él, la decisión de operarse u optar por un tratamiento conservador.
El plan Ansu
Tan solo unos días después de confirmarse su nueva lesión, se hizo oficial que Ansu Fati se declinaba por el tratamiento conservador. Esta fue su decisión desde el principio. Desde la cumbre con el Barcelona. En esa reunión inicial ya dijo que no quería volver a pasar por quirófano. Aunque no solo él. Profesionales que le habían tratado en los últimos tiempos también se inclinaban por esa opción conservadora.
Los tiempos no iban a distar demasiado. El tratamiento conservador le aseguraba estar alrededor de dos meses fuera. Hasta el momento de reincorporarse a las órdenes de Xavi Hernández. De operarse, se le aseguró que esto evitaría futuras recaídas y que tan solo estaría de baja unos tres meses. Ni esa 'promesa' convenció al futbolista. Prefirió no entrar de nuevo en el quirófano y dos meses después está integrándose en la dinámica.
El delantero todavía no va a completar los entrenamientos al mismo ritmo que sus compañeros. En su primer día, 20 minutos fueron suficiente para la toma de contacto. Son importantes, en este capítulo de la historia, las sensaciones. Cualquier alerta debe ser tomada en cuenta. El objetivo es evitar cualquier nueva recaída. El riesgo es alto y eso es algo que saben todos en Can Barça.
La presente será su primera semana de trabajo. Con el paso de los días irá subiéndose la intensidad de su trabajo. En total, tres semanas hasta su completa puesta a punto. Siempre y cuando no haya un susto de por medio. Si todo sigue bajo el plan presupuesto, la mirada se posa en tres fechas del calendario: el 18, el 21 y el 24 de abril.
El lunes 18 de abril, el Barcelona recibe en el Camp Nou al Cádiz. En esa convocatoria podría aparecer de nuevo el nombre de Ansu Fati entre el de los elegidos. Si no llega en plenas condiciones, se esperarán unos días más. Hay jornada intersemanal, por lo que una nueva oportunidad llegará ante la Real Sociedad el jueves 21. Además, ese domingo 24, el Barça se enfrenta al Rayo Vallecano, en el último partido aplazado que les queda a ambos conjuntos.
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