El FC Barcelona empató ante el Eintracht en un encuentro donde los alemanes pudieron marcar más goles. El conjunto local hizo valer el buen ambiente de su estadio y acorraló a un Barça que no mejoró hasta la última media hora de juego.
Knauff adelantó a los locales ya en la segunda mitad tras un golazo en la salida de un córner. Un tanto que rompió los esquemas culés y que obligó a Xavi Hernández a tomar medidas. Esas llegarían en el 60', cuando De Jong y Dembélé le metieron otra marcha al juego azulgrana.
Una combinación de estos dos, que finalizó Ferran Torres en el área, puso el 1-1 definitivo y que lleva los cuartos de final al Camp Nou sin ningún equipo por delante.