El FC Barcelona perdió ante el Eintracht en los cuartos de final de la Europa League y dijo adiós a la segunda competición europea. El cuadro azulgrana no jugó su mejor encuentro y acabó intentando remontar en los minutos finales. Una de las claves estuvo en el público, que por sorpresa dejó un panorama de cerca de 25.000 aficionados visitantes en un Camp Nou muy dividido. Joan Laporta ya ha anunciado que se investiga lo sucedido.
El presidente azulgrana, en un mensaje oficial en la televisión del Barça, contraprogramó la rueda de prensa de Xavi Hernández para dar detalles de lo sucedido. El máximo dirigente culé reconoció que lo sucedido en el Camp Nou fue "vergonzoso" y que se tomarán medidas una vez se haya recabado toda la información.
Pese a que en un primer momento se habían vendido solo 5.000 entradas a gente del Eintracht, finalmente fueron 25.000 hinchas y repartidos por todo el estadio azulgrana. El Barça, que pidió hace unos días que los abonados que no pudieran asistir cedieran gratis su entrada al club, ya se temía que el Camp Nou no estuviera lleno por las vacaciones de Semana Santa.
"Estamos preocupados por el hecho de que ha sido una vergüenza. Es una vergüenza que no se puede volver a repetir. Tenemos gran parte de la información de lo que ha pasado. Necesitamos tiempo para procesarlo y tomaremos medidas. Es indignante y vergonzoso lo que ha pasado", aseguró contundente Joan Laporta en sus declaraciones a la televisión del club.
Investigación abierta
"Lo que no podemos evitar son determinadas situaciones. Pero a partir de ahora tendremos que ser mucho más estrictos. No permitir según qué situaciones se han permitido porque siempre se han hecho. Permíteme que ahora no precise porque acabamos de obtener la información y la estamos gestionando".
"Se han producido situaciones no deseables y que no deberían haberse producido nunca. Cuando hayamos procesado toda la información tomaremos medidas y explicaremos el porqué. Como barcelonista me siento avergonzado de lo que he visto. Había muchos aficionados del equipo rival y menos aficionados vuestros. Lamento mucho lo que ha pasado, siento vergüenza", indicó el dirigente.
El hecho de que hubiera tanto aficionado visitante descuadró al vestuario culé. Algo que Laporta entiende porque les ha pasado "a todos". "No es habitual. Es una situación que no se tendría que haber producido por determinadas circunstancias que tenemos estudiadas, tomaremos medidas para que no se produzcan nunca más. Tendremos que explicarlo".
El mensaje del presidente es claro: "Esto continúa. Que la gente venga, por favor, a animar al equipo". El próximo duelo será ante el Cádiz. El Barça busca asegurarse el puesto de Champions y la presión será máxima: "No hemos podido ganar. Hemos perdido el partido y la eliminatoria. Hay que aceptarlo. Puede pasar. Son situaciones que se producen. Todos estamos tristes y enfadados por haber perdido. Tenemos que seguir adelante y pelear por La Liga".