Calero, del Espanyol: "Vivo apartado de las redes; si me tienen que decir algo, que sea a la cara"

En Boecillo nació y creció Fernando Calero (1995). La cercanía de este municipio de apenas 4.000 habitantes respecto a Valladolid, a 15 kilómetros de su centro, le permitió entrar de niño en la cantera de un clásico del fútbol español. De blanquivioleta debutó en Primera División en 2018 y un año después fichó por el Espanyol.

Pero antes de eso, antes de triunfar en su casa, tuvo que cruzarse tres cuartos de la Península: de Pucela a Málaga. Siendo un adolescente dejó su casa por cumplir su sueño. Le ayudó a madurar y cuando regresó al Valladolid, al año, lo devolvió a La Liga. Sergio González, su entrenador aquella temporada, dijo que se convertiría en un "emblema" del fútbol vallisoletano.

Salir por segunda vez del José Zorrilla fue más difícil. Saltó al Espanyol, donde le costó arrancar y para colmo descendió a Segunda. La constancia que ha mantenido durante toda su carrera le acabó asentando en el equipo perico. Un ascenso y una permanencia más tarde, Calero acaba de empezar su cuarta temporada en Primera.

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Este domingo recibe al Real Madrid en Cornellá (22:00 horas). Ha sido un verano de cambios en el Espanyol, marcado por la llegada de un nuevo entrenador (Diego Martínez) y la salida de varios referentes (Diego López, David López, Melendo...). Para Fernando, la principal novedad ha sido un cambio de posición: de ser central toda su vida a pivote.

Lo que no cambia en Calero es esa sencillez que acompaña siempre a los futbolistas castellanoleoneses, véase el salmantino Álvaro Arbeloa o el palentino Sergio Asenjo. Directo para hablar y no usa las redes porque las ve tóxicas (y porque no le gusta engancharse al teléfono), explica a EL ESPAÑOL en esta entrevista.

Fernando Calero, con el Espanyol EFE

Cuarta temporada en Primera División. Para un futbolista que empezó debutando en Segunda, ¿qué significa esa continuidad?

Ese es el sueño que quiere cumplir cualquier chaval que empieza desde abajo. Yo empecé en Segunda y he pasado dos temporadas ahí. Por suerte, he logrado dos ascensos. Al final es una alegría muy grande poder estar en Primera y cumplir el objetivo de siempre mantener la categoría para poder estar en la máxima del fútbol español.

A los nueve años ya estaba en la cantera del Valladolid, ¿siempre se vio llegando a profesional?

Bueno, como te he dicho antes, es un sueño que tienen todos los chavales que empiezan. Pero es muy complicado. Por suerte, los entrenadores que tuve yo en la cantera siempre te lo hacían recordar: que por muy bueno que seas, por mucho que te esfuerces, hay veces que tienes suerte y hay veces que no y por lo que sea no llegas. Y lo he podido vivir a lo largo de mi vida y de mi trayectoria, con compañeros que eran muy buenos y que al final, por un motivo o por otro, no han llegado.

Entonces, estoy agradecido a todo el mundo que me ha podido ayudar y a mí mismo por haber sido tan constante para lograr este sueño.

Nació en Boecillo, pegado a Valladolid, y ahí pasó toda su infancia. ¿Fue difícil luego salir de casa con 15-16 años para irse a Málaga?

Si, al principio es un momento complicado porque al final te vas solo a una ciudad, a 700 kilómetros de tu casa, donde no conoces a nadie y donde vas a intentar seguir avanzando profesionalmente cuando todavía eres un chaval.

Pero creo que es la experiencia que más me ha ayudado en mi vida. Me ayudó a madurar rapidísimo en todos los sentidos, tanto futbolísticamente como persona. Y es algo a lo que siempre estaré agradecido, a haber tomado la decisión de irme tan joven porque creo que me ha ayudado mucho. 

"Fue difícil irme a 700 kilómetros de casa con 15 años, pero es la experiencia que más me ha ayudado en mi vida"

Va casi implícito en la vida de un futbolista. ¿A veces siente que la gente realmente no conoce bien su profesión?

Hay que estar dentro de este mundo, tener algún familiar o algún amigo cercano que haya vivido esta profesión para saber lo complicado que es en algunos momentos. Por supuesto, yo digo que somos unos grandes privilegiados, que tenemos unas vidas muy buenas comparados con otras personas, con el resto de la sociedad.

Pero al final somos personas y hay momentos duros en todos los sentidos y decisiones difíciles de tomar. Y creo que somos personas normales y cualquier cosa que pase en nuestro día a día o en nuestro entorno familiar nos afecta igual. Nosotros tenemos que rendir al máximo en nuestro trabajo y aguantar nuestra situación.

No usa mucho las redes. Parece que eso ahora es lo raro...

Aparte de porque soy un poco dejado con el teléfono, no me gusta estar todo el día enganchado a él, no las uso porque pienso que al nivel que hemos llegado puede ser más perjudicial que beneficioso. Estamos expuestos públicamente a comentarios de personas normalmente anónimas. Nos puede hacer más daño que resultar beneficioso.

Prefiero estar un poco apartado y que si hay alguien que me tenga que decir las cosas claramente, sean buenas o sean malas, intento que sea a la cara y gente cercana a mí. 

"Se han ido algunos referentes del Espanyol como Diego López, pero hay que adaptarse"

Esta semana se ha ido Embarba, que llevaba dos años y medio en el Espanyol. Antes Melendo, David López, Diego... ¿Cómo se vive dentro de un vestuario de Primera el mercado de fichajes y, especialmente, cuando se acercan los últimos días de este?

Bueno, yo a pesar de que tengo 26 años, ya considero que llevo bastantes años en Primera y Segunda División. Y lo vas cogiendo como algo más habitual, que se vayan algunos compañeros, que vengan otros.

Sí que es verdad que este año se han ido algunos referentes como Diego López, que conocen mucho el club, que ayuda mucho a la gente nueva y a la gente de cantera que sube. Pero bueno, al final hay que adaptarse. Sabemos que en el mundo del fútbol un día estás aquí y al día siguiente te tienes que ir tú o tienes que recibir a un compañero e intentas hacerlo de la forma que te gustaría que lo hicieran. Así nos lo refleja el míster, que ayudemos todo lo posible a los nuevos fichajes para que su adaptación sea lo más rápida.

¿Se disfruta menos el mercado de fichajes como futbolista?

En temporada ya el equipo está formado y es trabajar día a día para el partido que te toca el fin de semana. En verano es un proceso, una puesta a punto, al principio físicamente con bastante exigencia y luego hay movimientos.

Yo creo que cada uno tiene que estar tranquilo en su situación e intentar aportar lo máximo que pueda por el equipo, que al final es en el que estás y el que te está pagando, y ayudar a los compañeros. 

¿Cómo se gestiona cuando se habla de uno mismo? ¿Le ha pasado de llegar al tramo final del verano y no saber bien qué va a pasar contigo?

Alguna vez me ha pasado e intento llevarlo con tranquilidad. La mayoría de los jugadores, sino todos, tenemos representante. Ellos son los que al final se encargan de hacer el trabajo de hablar con un club, con otro, y son los que en teoría te tienen que mantener un poco al margen para que tú sigas centrado en lo tuyo y hagas tu trabajo.

Por suerte, en mi empresa se trabaja así y lo único que me dicen es que yo esté centrado en mi día a día, en intentar mejorar, y ya ellos se encargarán de hacer las gestiones.

Para este toca tranquilidad, ¿no? Ha empezado la temporada jugando con el nuevo mister, pero de pivote defensivo.

Ya me habían preguntado otras veces si me veía jugando ahí. La verdad es que de forma profesional nunca lo había hecho, pues no sé, me sentía raro. Pero desde que llegó Diego Martínez, me probó ahí y poco a poco, sobre todo en los entrenamientos, me voy sintiendo mejor.

Creo que cojo los conceptos de la nueva posición bastante rápido y al final es una opción más que se abre. Jugar en varias posiciones te abre espacio en el equipo, te abre de poder tener más minutos y es lo que queremos. Al final, cada jugador es egoísta y quiere jugar lo máximo posible para ayudar al equipo.

Yo intento hacerlo bien en la posición que sea. Intento ayudar desde mi rol al equipo y creo que, de momento, estoy contento en esa nueva posición.

¿Qué tal con Diego Martínez? ¿Qué le pide al equipo?

Muy bien. Desde su llegada ha sido un tío muy, muy cercano, pero a la vez muy exigente. O sea, en cada entrenamiento, en cada balón disputado, en cada ejercicio, te hace exprimir al 100%. No quiere que pierdas la concentración en ningún momento.

Eso nos va a ayudar mucho de cara a La Liga, de cara a los partidos. El estar siempre concentrado en no perder la cara al partido porque en cualquier momento, vayas ganando o vayas perdiendo, se puede dar la vuelta al marcador. Eso nos lo inculca siempre, dar el máximo hasta el final, y seguro que iremos obteniendo mejores resultados.

Fernando Calero, durante un viaje con el Espanyol RCD Espanyol

¿Cómo se siente en el Espanyol tras tres años en el club?

Me siento muy a gusto. Ya es la cuarta temporada y estoy súper adaptado. Conozco a todo el mundo. Desde oficinas, fisios... Para mí ya es como mi casa, como mi familia. Al estar a gusto en un sitio es cuando puedes dar el máximo de ti y ahora me siento así. Y seguro que eso me ayuda a exprimirme al máximo y sacar mi mejor versión.

Ahora toca el Real Madrid. ¿Es verdad que contra estos equipos un futbolista sale con un plus a todos los niveles?

Es un error que a veces cometemos los futbolistas, el no estar concentrados al mismo nivel en todos los partidos dependiendo cuál sea el rival. Es un error grande. En Primera División, cualquier equipo tiene grandes jugadores y en cualquier momento te pueden hacer gol o te pueden crear una ocasión.

"En partidos como el del Real Madrid no te vale el 100%, tienes que dar un 120%"

Pero sí es verdad que ante estos rivales tienes que dar un plus más. Si en otros partidos vas al 100%, en esto es igual ese 100% no te sirven y tienes que dar un 120%. Seguro que lo vamos a conseguir dar. Me acuerdo que el año pasado en nuestro campo logramos la victoria y es por lo que vamos a luchar este año, por repetir el resultado e intentar ganar los tres puntos.

Se va a hablar mucho de Benzema, premiado esta semana por la UEFA. Como defensa, ¿qué le da más respeto: medirse a un futbolista como él o alguien con las características de Vinicius?

Son perfiles diferentes. Yo por mi posición igual tengo más cerca a Benzema durante el partido. Es verdad que son jugadores de nivel muy alto, muy top, y que están en un gran nivel de forma. Pero para eso preparamos el partido y trabajamos durante una semana entera, para intentar ver dónde ellos son buenos e intentar tapar sus mejores habilidades y que no se les dé el partido que ellos quieren. El objetivo es que estén incómodos durante los 90 minutos y es lo que intentaremos.

¿En quién se fija dentro de un campo de fútbol?

No sabría decir a alguien en especial, alguien en singular. Hay muy buenos jugadores dentro de la liga. Yo intento fijarme más, sobre todo, en los jugadores que son de nivel top en mi posición. Me gusta ver qué cosas hacen bien que yo igual tengo que mejorar. Pero no puedo decir ninguno en especial porque no soy muy hincha o forofo de ningún jugador.

Para acabar. Un deseo para este domingo y otro para la temporada.

Repetir este domingo el resultado del año pasado, que estaría muy bien. Y para la temporada de Espanyol, pues conseguir sentar unas bases en las que la afición esté con nosotros, se sienta orgullosa de venir al campo cada día. Que vengan a animarnos sea cual sea el resultado, que por supuesto queremos la victoria. cada fin de semana, a animarlo y sea cual sea el resultado. Que la gente se vaya orgullosa de lo que ha visto al equipo en el campo.