Alexia Putellas, con muletas tras su lesión con la Selección, y Jorge Vilda, seleccionador nacional de fútbol femenino.
Las jugadoras rebeldes de la Selección culpan a Vilda de la lesión de Putellas y le acusan de "controlador"
Las siete futbolistas pertenecientes al Barcelona critican los entrenamientos del seleccionador y la carga de minutos durante la temporada.
27 septiembre, 2022 02:15El motín de una parte de la selección española de fútbol femenino contra Jorge Vilda sigue su curso. Tras el comunicado de 16 jugadoras, las 15 que enviaron un email de renuncia más Alexia Putellas, la Federación mantiene su intención de que el actual seleccionador continúe en su cargo hasta el Mundial 2023 y de no contar en las convocatorias con ninguna de las futbolistas rebeldes.
La tensión en la sede de la RFEF en Las Rozas crece según pasan los días y más cuando Vilda deberá de dar a conocer esta semana su lista de convocadas para los encuentros amistosos contra Suecia y EEUU en el mes de octubre. Eso sí, el comunicado de las futbolistas no aclaró demasiado las razones ni los porqués de su motín contra el seleccionador.
Sin embargo, según ha podido saber EL ESPAÑOL, tres de las razones que esgrimen las siete futbolistas del Barcelona que publicaron el comunicado en sus redes sociales son la mala preparación de la parte física en los entrenamientos, la carga de minutos durante la pasada temporada y el "excesivo control" en las concentraciones. De hecho, esta facción de las rebeldes culpa también a Vilda de la lesión de Alexia Putellas antes de la pasada Eurocopa.
Jorge Vilda, en un partido de la selección española de fútbol femenino en la Eurocopa 2022
Patri Guijarro, Mapi León, Sandra Paños, Aitana Bonmatí, Claudia Pina, Mariona Caldentey y la propia Alexia Putellas fueron las jugadoras culés que hicieron pública su postura contra la RFEF y contra Vilda la pasada semana. Las nueve restantes son Lola Gallardo (Atlético), Ainhoa Moraza (Atlético), Amaiur Sarriegi (Real Sociedad), Nerea Eizagirre (Real Sociedad), Laia Aleixandri (Manchester City), Leila Ouahabi (Manchester City), Ona Batlle (Manchester United), Lucía García (Manchester United) y Andrea Pereira (Club América).
En esta lista no figura Irene Paredes, capitana de la Selección y futbolista del Barça, que acabó muy molesta tras tener que ser una de las que dieron la cara después de que se filtrara el pasado 30 de agosto las reuniones que habían existido con Luis Rubiales y en las que se criticaron los métodos del seleccionador.
La lesión de Alexia Putellas el pasado 5 de julio provocó un gran cisma en la Selección. La Balón de Oro 2021 se rompió el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda y tuvo que ser operada. El tiempo de baja será aproximadamente de un año y la gran estrella del Barça se perderá también toda la temporada 2022/2023.
Tanto el FC Barcelona como las compañeras de Alexia en su club creen que el seleccionador sobrecargó de trabajo a la mejor jugadora del mundo. La centrocampista era indiscutible y disputó hasta los amistosos. Las jugadoras culés, la mayoría titulares con España, aseguran que Vilda no ha sabido gestionar el grupo y que les ha obligado a esfuerzos que ponen en peligro su condición física.
Putellas se lesionó sola en un entrenamiento al hacer un apoyo para disparar a portería, sin embargo, las rebeldes de la Selección acusan al entrenador de métodos anticuados y poco profesionales en los ejercicios. El grupo de las jugadoras del Barcelona han sido en todo momento las cabecillas del motín en la Selección y tampoco están conformes con el excesivo control de Vilda sobre ellas en las concentraciones.
"Controlador y mano de hierro"
Según fuentes próximas a las futbolistas, el entrenador es "controlador", demasiado duro con las prohibiciones antes de los partidos e "intenta mandar con mano de hierro" en la Selección. Todas estas razones no han querido hacerlas públicas, pero las jugadoras aseguran haberlas debatido con los altos cargos de la Federación y con Luis Rubiales.
Jorge Vilda dando órdenes a sus jugadoras durante la Eurocopa 2022.
Vilda ya se defendió públicamente después de la lesión de Alexia Putellas y de las insinuaciones de algunas preguntas: "No creo que haya que buscar culpables". El seleccionador intentó así acabar con los comentarios procedentes de Barcelona que aseguraban que era un "entrenador poco profesional" y que "tenía la culpa de la lesión" de la Balón de Oro por haberla sobrecargado de minutos.
Un motín sin solución, ya que las jugadoras no piensan dar marcha atrás en su decisión y es "imposible" que vuelvan a la Selección en lo que Vilda esté en el banquillo. El fútbol femenino español es el gran perdedor de una guerra sin precedentes y con el Mundial del próximo verano en Australia a la vuelta de la esquina. Un gol en propia puerta difícil de superar.
