El caso de los pagos del Barcelona a José María Enríquez Negreira, mientras era el número dos del CTA, pone una terrible sombra sobre el estamento arbitral español. Su transparencia está en entredicho por este escándalo y ya se toman medidas para contrarrestar tal efecto.
El CTA, por una cuestión ética, ha notificado a los árbitros la prohibición de mantener relaciones profesionales con figuras que actuaban como 'asesores' o 'coaches' y les acompañaban a los estadios de Primera División. Era el caso del hijo de Negreira, Javier Enríquez.
Según ha desvelado Cadena SER, Javier Enríquez seguía manteniendo hasta esta temporada relaciones laborables con varios colegiados de Primera División. Principalmente, era con los más jóvenes y novatos en la máxima categoría del fútbol español y les seguía acompañando a los estadios.
Estará prohibido relacionarse lo más mínimo con Enríquez hijo, así como ser acompañados por cualquier otra persona que no pertenezca al equipo arbitral de los partidos. El 'caso Negreira' ha empezado a cambiar el escenario de los colegiados en España, mientras se busca depurar responsabilidades por el escándalo.
El CTA, tal y como fue revelado por TV3, ya ha enviado a sus árbitros un cuestionario con el que trata de investigar al hijo de Negreira por su relación con ellos. En dicho documento, se incluye la pregunta sobre si hubo algún tipo de compensación económica, en cuyo caso se deberá relacionar la cantidad abonada.
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Los clubes alzan la voz
LaLiga y su Comisión Delegada rechazaron y repudiaron los hechos conocidos por "el caso Negreira/FC Barcelona", a la vez que anunciaron que "trabajan activamente por esclarecer cualquier irregularidad que se haya podido producir alrededor" del mismo, "ya sea de carácter deportivo o de cualquier otra índole".
La Comisión Delegada de LaLiga, compuesta por el Atlético de Madrid, el Levante, el Sevilla, el Betis, la Real Sociedad, el Cádiz, el Getafe, el Villarreal, el Tenerife, el Alavés, el Eibar, Las Palmas, el Lugo y el Huesca, mantuvo una reunión este martes en la que el organismo explicó a sus miembros las diferentes actuaciones que ha realizado tras conocerse la investigación que la Fiscalía de Barcelona ha iniciado en relación a unos pagos que la empresa del exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros, José María Enríquez Negreira, recibió del Fútbol Club Barcelona entre 2016 y 2018 por 1,4 millones de euros.