Los árbitros dicen 'basta', mientras el fútbol español se pone patas arriba. Este miércoles se reúnen los clubes en la Asamblea extraordinaria de LaLiga para tratar su malestar con los árbitros, mientras en la Federación pide respeto "y no contribuir a la crispación en toda España".
Desde que la Asamblea se anunció, el pasado 4 de abril, clubes como el Sevilla y el Espanyol se han quejado de los colegiados a través de comunicados (antes lo hicieron Cádiz, Atlético y Osasuna). Otros lo han hecho con declaraciones incendiarias, como el Valencia a través de su directivo Javier Solís: "El fútbol huele muy mal", dijo el domingo.
En primer plano está el 'caso Negreira', que ha añadido mayor desconfianza en torno al Comité Técnico de Árbitros. El clima se tensa contra los encargados de impartir orden en los partidos de fútbol, sea en el nivel que sea ("hasta menores que comienzan en categorías inferiores"), como se pudo demostrar el pasado fin de semana por la agresión sufrida por un colegiado en Ceuta.
[Los árbitros acusan a LaLiga de querer crear "un clima irrespirable" y descartan ir a la huelga]
El segundo punto del orden del día de la Asamblea de este miércoles será el asunto Negreira/arbitraje. Desde LaLiga entienden que hay que hacer una "profunda reflexión", ya que existe una "desazón importante" en esta cuestión y en la del VAR.
Javier Tebas, presidente de la patronal, aseguró que están "ocurriendo cosas que parecen raras", como la gran diferencia en cuanto a expulsados entre La Liga (115) y la Premier League (29). El convenio arbitral con la RFEF acaba el próximo 30 de junio y LaLiga quiere aprovechar para restar competencias al ente federativo, que no dependa "exclusivamente" de él. El espejo, según la patronal, es un modelo 100% independiente como en el campeonato inglés o en la Bundesliga, que aquí es imposible sin mediación del Gobierno.
Ante esto, en el comunicado que el estamento arbitral emitió este martes, el CTA recalcó su autonomía, "que debe serlo y lo será siempre de La Liga y de los clubes a pesar de la confusión en la que se ha tratado de sumergir al aficionado". "Las federaciones son los entes encargados de organizar el fútbol en cada país y nuestro estamento trabaja con autonomía y profesionalidad por el bien del arbitraje y del fútbol", añadió.
Y es que en la Federación sienten esta crispación como parte de una campaña: "Lamentamos los ataques permanentes de LaLiga y de sus principales dirigentes. El vídeo difundido por su director de Competiciones, Luis Gil, tratando de señalar y ridiculizar las actuaciones arbitrales, es una muestra más del interés de La Liga en generar un clima irrespirable hacia nuestro colectivo, sembrar la duda sobre nuestras decisiones y menoscabar la profesionalidad arbitral. Por ello, los árbitros de Primera y Segunda División solicitamos a La Liga y a sus dirigentes respeto y responsabilidad institucional ante un hecho sin precedentes en el fútbol español", decía el comunicado.
En el CTA consideran que el ambiente se ha vuelto "irrespirable" para los colegiados. En la Federación admiten existir preocupación: "Hay que pedir la máxima responsabilidad a todos los dirigentes del fútbol, porque no se puede generar un ambiente hostil contra los árbitros ni se puede criminalizar al colectivo arbitral", del que dijo Luis Rubiales días atrás que se sienten "orgullosos".
Los árbitros españoles creen que hay una persecución en su contra, cuando en Europa la situación es radicalmente diferente. Los colegiados de La Liga son los que más designaciones acumulan en la presente edición de la Champions League: 15, contando ya con la de Del Cerro Grande para el Inter-Benfica de este miércoles.
Ningún colectivo arbitral de otro país suma tantas designaciones en lo que va de Champions League. Se acercan los italianos, que acumulan 13 tras el arbitraje de Daniele Orsato en el Chelsea-Real Madrid. Ingleses (11), franceses (10) y alemanes (9) cierran la lista de los colegiados de las grandes ligas europeas.
Esto sirve como argumento contra los críticos de que los árbitros españoles sean los que más cobran del mundo. A nivel internacional son en los que más se confía y la UEFA los suele tener en cuenta para los partidos importantes.
Los sueldos más altos
Desde septiembre de 2020, los árbitros españoles son profesionales. Eso conllevó un sueldo de 137.000 euros brutos para los colegiados de La Liga. Eso es fijo, independientemente de su rendimiento o sanciones internas. A eso se añade la variable en función de los partidos que se arbitran desde el terreno de juego (4.200 euros por encuentro) o desde la sala del VAR (2.100).
El sueldo mensual de los árbitros de La Liga (12.500) dobla a los de las otras grandes competiciones del continente (Serie A, hasta 6.500; Ligue-1, 6.000; y Bundesliga, hasta 6.000) y supera con creces a la Premier, cuyos árbitros tienen un fijo de 3.700 euros al mes. Que los sueldos sean tan altos sin estar sujetos al rendimiento es la gran queja en este aspecto que tienen los clubes españoles.
Pero la dependencia de los árbitros y sus sueldos no son los únicos asuntos espinosos sobre la mesa ante los que alzan la voz los clubes de La Liga. El VAR agrada cada vez a menos clubes y algunos como el Atlético de Madrid piden medidas en cuanto a las designaciones, llegando a plantear que no se hagan públicas hasta el momento del partido.
En cuanto a las designaciones, como ha reivindicado el CTA ante el aluvión de ataque, hay que tener en cuenta lo siguiente. Actualmente, el organismo no designa a los árbitros, sino que lo hace el llamado Comité de Designación que componen un miembro de la RFEF, un miembro de LaLiga y otro elegido de común acuerdo por estos dos entes o, en caso de no haberlo, por el CSD.
Cisma en el fútbol español, ahora por los árbitros. Este miércoles será un día importante. Los colegiados, que se han querido adelantar, ya han dejado su palabra. De momento no quieren adoptar "medidas drásticas", pero en el aire sigue la amenaza de una huelga que ya se han planteado.