La odisea de Infantino para encontrar escolta en el Mundial: Nueva Zelanda y Australia se lo deniegan

El Mundial de fútbol femenino de Australia y Nueva Zelanda finaliza este domingo con la disputa de la final entre España e Inglaterra. El choque decidirá qué selección se pone la estrella encima del escudo en un partido que se prevé de lo más atractivo, pero más allá de lo que sucede en el terreno de juego esta cita ha dejado varias anécdotas dignas de contar.

Una de ellas la ha vivido el presidente de la FIFA, Gianni Infantino. El directivo del máximo organismo del fútbol internacional lleva tiempo presente en este Mundial femenino que cuenta con dos países como anfitriones, y en ambos ha encontrado serios problemas para obtener escolta policial.

El presidente de la FIFA quería garantizar su seguridad durante su estancia tanto en Nueva Zelanda como en Australia, pero los dos países oceánicos le han puesto trabas para otorgarle una escolta policial. Le sucedió primero en Nueva Zelanda y le ha sucedido más recientemente en Australia, el otro organizador de este Mundial femenino de fútbol.

[Alba Redondo: "Iniesta es mi ídolo, pero no me he visualizado metiendo el gol de la final como él"]

La FIFA solicitó contar con un vehículo policial para que escoltara a su presidente en tres estados diferentes de Australia, y en dos de ellos se encontró con la negativa. La policía de Queensland, al noroeste del país, indicó en un comunicado que la petición del máximo organismo del fútbol mundial "fue rechazada (en línea con otras jurisdicciones en Australia y Nueva Zelanda) ya que crearía inconvenientes innecesarios en la comunidad".

En la misma línea fue la policía de Victoria, al sureste del país, que digo rechazar esta petición de la FIFA porque este tipo de escolta policial "está reservada para personas internacionalmente protegidas", y consideraban que Infantino no era una de ellas.

[Vilda ilusiona antes de la final: "Podemos hacer que sea el día más feliz de la vida de muchas personas"]

Tan sólo el estado de Nueva Gales del Sur dio el visto bueno para que Gianni Infantino pudiera contar con un vehículo de escolta policial, aunque lo hizo a cambio del pago de una tasa por parte de la FIFA, ya que se trata de un servicio que tiene el estado para casos especiales. Este servicio, según los datos de la policía, se paga entre 34 y 44 dólares australianos la hora, es decir, entre 19 y 25 euros.

Los problemas que tuvo Gianni Infantino para encontrar un vehículo que le proporcionara escolta policial no se redujeron, sin embargo, tan sólo a Australia. Tal y como informó el diario The Guardian, el presidente de la FIFA también vivió una situación similar durante su estancia en Nueva Zelanda, el otro país organizador de este Mundial de fútbol femenino.

El país denegó la opción de que Infantino contara con un coche de escolta policial, aunque el presidente de la FIFA ya no tendrá que visitar más este país ya que la final entre España e Inglaterra se disputa en Sídney.